El titular de Comercio de EU maquilla su fortuna para estar entre los más ricos

Una historia publicada por Forbes este martes rastreó lo que parecía una red de engaños urdida por el secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross. Pero la nota también levanta una sombra de incertidumbre sobre el reporteo del medio y genera serios cuestionamientos sobre la credibilidad de su popular ranking de millonarios.

El artículo de 3,000 palabras escrito por el reportero de Forbes, Dan Alexander, señala que Ross embelleció repetidamente su valor al darse crédito por su dinero como inversionista.

La investigación de Alexander aparentemente comenzó el mes pasado, cuando la revista dijo a Ross que iba a sacarlo del ranking anual de multimillonarios en Estados Unidos, The Forbes 400.

Formularios financieros dados a conocer luego de la nominación de Ross a Departamento de Comercio revelaron que tenía menos de 700 millones de dólares en activos, cifra mucho menor a los 2,900 millones de dólares con los que la publicación había listado su valor neto un año antes. Y Alexander asegura que encontró que Ross había inflado su valor desde 2003, cuando llegó por primera vez al famoso conteo.

“Parece claro que Ross nos mintió, la más reciente en una aparente secuencia de mentiras, exageraciones, omisiones y fabricaciones que han ocurrido desde 2004”, escribió Alexander.

Forbes cataloga su listado Forbes 400 como la “lista de la riqueza definitiva en Estados Unidos” y es citado por diversos medios del mundo.

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Además, es un símbolo de estatus entre los miembros de la clase alta de Estados Unidos, que se interesan en estos aspectos.

Pero Forbes no fue el único que identificó a Ross como un multimillonario. Cuando la historia de Alexander fue publicada este martes, Bloomberg también tenía listada la fortuna del funcionario en 2,900 millones de dólares. Un vocero de la agencia dijo que no han cambiado su valuación de Ross, ya que está basada en “el desempeño de sus fondos de recuperación, los términos de la venta en 2006 de su firma a Invesco por 375 millones de dólares e información proporcionada directamente por el inversor tras su nominación para formar parte del gabinete de Trump”.

Forbes mantuvo el valor de Ross en 2,500 millones de dólares en sus conteos tras la publicación de la historia, hasta que lo bajó a 700 millones.

En una declaración para CNNMoney, la vocera de Forbes, Christina Vega, defendió los métodos de reporteo de la publicación, pero reconoció que otros han mentido con el objetivo de entrar en su listado.

“Ha habido casos raros en la historia del conteo en que la gente nos ha mentido descaradamente en un esfuerzo por maquillar sus fortunas para arriba o para abajo. Tratamos de ver estos casos lo más pronto posible y los reportamos de manera inmediata a nuestros lectores. El reporteo sobre Wilbur Ross muestra qué tan comprometidos estamos en desvelar nueva información año tras año, y nuestra voluntad de transparencia cuando obtenemos nueva información”.

En un comunicado, un vocero del Departamento de Comercio dijo: “Forbes cita a empleados, sin conocimiento completo, y todos menos uno son anónimos. No responderemos más”.

“La revelación de los documentos del secretario Ross fue realizada por consejeros legales y contadores. Se siguieron las reglas relevantes y los documentos fueron revisados minuciosamente y aprobados por oficiales de ética en el Departamento de Comercio y la Oficina de Ética Gubernamental. Lamentamos cualquier mala comunicación previa.”

Vega, sin embargo, lo rechazó.

“Wilbur Ross mismo confirmó en sus documentos que ahora tiene 700 millones o menos en activos”, dijo Vega en un correo electrónico.

“La historia de Forbes está basada en un reporteo extensivo, incluidos los documentos financieros que Ross presentó este año, lo que Wilbur Ross dijo a Forbes y lo que exempleados dijero a Forbes. La revista tiene numerosas fuentes que estuvieron cerca de Ross mientras hacía su fortuna, que conocen específicamente, cómo no pudo haber acumulado 1,000 millones de dólares… Mucho menos los 3,000 millones de dólares que aseguraba”.

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El valor preciso de los multimillonarios está frecuentemente envuelto en misterio, especialmente cuando una parte sustancial de sus recursos viene -como en el caso de Ross- de compañías privadas que no deben rendir cuentas sobre sus finanzas.

Como resultado, conteos como Forbes 40 usualmente se ‘condimentan’ un poco.

El valor neto del presidente Donald Trump, por ejemplo, ha sido sujeto a escrutinio.

“Ha habido una regla en Forbes por los últimos 30 años”, dijo el editor de la publicación, Randall Lane, en 2015. “Toma lo que Trump dice y divídelo entre tres”.

La más reciente edición del conteo salió el mes pasado, marcando su 36° año consecutivo. Cada vez, la lista está acompañada con una explicación de la investigación que deriva en el conteo.

“Nuestros reporteros investigan a profundidad. Este año comenzamos la lista con más de 600 individuos considerados como fuertes candidatos”, explicó la revista el mes pasado.

“Cuando es posible nos encontramos con los miembros de Forbes 400 en persona o hablamos con ellos por teléfono. También entrevistamos a sus empleados, rivales, compañeros y abogados. Descubrir sus fortunas requiere que investiguemos en miles de documentos de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos, registros de la corte, registros probatorios e historias digitales e impresas. Tomamos en cuenta todo tipo de activos: participaciones en empresas públicas y privadas, bienes raíces, arte, yates, aeronaves, ranchos, viñedos, joyería, colecciones de automóviles y más”.

La lista tiene algunos puntos flacos. Tal y como la revista dijo el mes pasado, hay limitaciones para crear la lista.

“Por supuesto, no pretendemos conocer todo lo que está listado en las hojas de balance privadas de cada multimillonario, a pesar de que algunos candidatos sí nos facilitaron papeleo para ese efecto”, continúa la explicación.

“Algunos multimillonarios que presiden firmas privadas estuvieron felices de compartirnos sus cifras financieras, pero otros no tanto”.

Las revelaciones sobre Ross el martes reverberan en Washington y Wall Street, la televisión y Twitter. Pero algunos vieron la historia como una crítica a los conteos de Forbes.

“La nota muestra qué tan embellecida está la lista Forbes 400”, tuiteó el columnista de MarketWatch Rex Mutting. “La lista Forbes 400 está tan inflada como la fortuna de Ross”.

Otros dieron crédito a la publicación por escribir sobre sus limitaciones previas.

“La historia de Forbes sobre Wilbur Ross no-multimillonario es un ejemplo de cómo transparentar los errores de reporteo pasados”, dijo el columnista de Bloomberg Justin Fox.

La publicación también señaló sus errores de reporteo previos como un factor detrás de la inclusión de Ross en su club de élite. En la historia del martes, Alexander describió una correspondencia crédula entre un exreportero de Forbes y Ross.

“Le dije que vamos a comenzar en 1,000 millones de dólares”, dijo el reportero cuyo nombre no fue revelado en sus notas tras hablar con Ross. “Y dijo ‘sí, está bien, gracias’”.

Desde ahí, dijo Alexander, Forbes continuó a rastrear el valor neto de Ross.