TransCanada afirma que sólo "detuvo" el gasoducto en Hidalgo, pero no lo canceló
Las informaciones sobre la cancelación del gigante TransCanada de uno de los gasoductos que construye en el país, por conflictos para cruzar el estado de Hidalgo, encendió las alarmas sobre un posible abandono de una inversión de 554 millones de dólares (mdd).
En un comunicado, la compañía expresó su hartazgo por el retraso de casi tres años que lleva el paso de su infraestructura por este estado. “En Hidalgo, luego de tres años de esfuerzos y buena voluntad, nuestros proyectos registran retrasos significativos y pérdidas multimillonarias”, dice el texto, firmado por Transportadora de Gas Natural de la Huasteca, filial de TransCanada, y fechado el 13 de noviembre.
En la misma publicación, la compañía asegura que, bajo las condiciones actuales, los gasoductos “no podrán ser concluidos”. Pero la empresa asegura que esto no significa que se haya cancelado la construcción del gasoducto, cuya licitación ganó en 2015 para transportar gas natural desde Villa de Reyes, en San Luis Potosí, a Tula, en Hidalgo.
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“Los proyectos no están cancelados y las causas no son ‘desacuerdos con pobladores en Hidalgo’”, dijo la empresa a una solicitud de información de Expansión. La firma aclaró que sí ha detenido los trabajos en este tramo del gasoducto en Hidalgo y en otro que construye entre Tuxpan, Veracruz, a Tula. Este segundo tramo, que tiene una inversión total de 283 mdd, se encuentra a la espera de que la Secretaría de Energía (Sener) haga las consultas entre las comunidades de los municipios de Puebla por donde va a cruzar.
“Dadas las circunstancias que prevalecen en el estado de Hidalgo, nuestros proyectos han excedido de manera conjunta nuestro tiempo estimado de construcción por más de 56 meses, así como los costos asociados con estas demoras. Nuestro trabajo continúa en ambos proyectos en otras zonas, mientras evaluamos nuestras opciones con respecto a la ruta actual en el estado de Hidalgo”, afirma la empresa.
La Sener y CFE no contestaron de manera inmediata a solicitudes de comentarios para esta nota.
Los proyectos de Villa de Reyes-Tula y Tuxpan-Tula aparecen entre los que la Sener identifica con “problemáticas sociales”, además del Guaymas-El Oro, La Laguna-Aguascalientes y Villa de Reyes-Aguascalientes-Guadalajara, según datos del reporte Estatus de la infraestructura de Gas Natural de octubre de este año.
“Tengo la impresión de que, a las empresas, el proceso para convencer a las comunidades y acercarse a ellas las tomó por sorpresa. (…) Hay una falla en el diseño institucional, tanto de los reguladores como de las empresas, para anticiparse a estas situaciones”, consideró el investigador de la Universidad de Rice, Adrián Duhalt.
Los ductos forman parte de una red que en realidad se extiende hasta Brownsville, en Texas, en un mega ducto que construye de manera conjunta TransCanada con IEnova desde el sur de Estados Unidos hasta Tuxpan, atravesando parte del Golfo de México. Este ducto tendrá una capacidad de 2,600 millones de pies cúbicos diarios, con una inversión estimada de 2,111 mdd, según datos de la Sener.
Este gasoducto marino es la apuesta más importante de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), hasta la fecha, para suministrar sus plantas de generación con este combustible. La eléctrica nacional lleva cerca de una década transitando hacia el consumo de más gas natural para depender menos del combustóleo, un residuo de la refinación del petróleo a gasolina, que resulta más costoso y contaminante.