Las ventas no solo se concentran en Quintana Roo, Solesyto ha llegado a otros estados como Morelos, Querétaro, Jalisco, Tabasco, Guerrero y Puebla.
Brigitta van Tussenbroek, la investigadora de la UNAM, menciona que con el sargazo se puede fabricar una sustancia antioxidante útil en la industria farmacéutica, aunque refiere que todavía se tienen que hacer algunos estudios que demuestren su efectividad. De momento, uno de los usos alternativos que recomienda es como fertilizante natural. Incluso, hay firmas como Salgax ya lo comercializan.
Otros alternativas son fabricar ladrillos con esta plaga. Blue Green México, un vivero en Puerto Morelos, planea instalar cinco fábricas de ladrillos de sargazo, la fabricación de estos ladrillos se hace de la misma manera que los ladrillos de adobe: en un horno cuya temperatura elimina el olor fétido que tiene el sargazo.
Los usos no se limitan ahí: Grupo Regio y la emprendedora Victoria Morfin crearon una firma llamada Sargánico, que se dedica a la fabricación de productos elaborados como libretas, porta vasos, portamenús y tarjetas de presentación.
El camino para que México aproveche el 100% del sargazo en la industria de alimentos o manufactura aún es largo ya que hace falta mucha investigación y pruebas en laboratorio, asegura Van Tussenbroek.