En un comunicado emitido a la Bolsa Mexicana de Valores, la empresa destacó que el arranque de actividades en esta filial forma parte de su plan de expansión internacional, lo que se suma a la construcción, en los próximos tres años, de dos nuevas plantas industriales en Tizayuca, Hidalgo, y en Monterrey, Nuevo León.
“El bloque regional de América del Norte, México-Estados Unidos-Canadá, es el mejor lugar para invertir y crecer, por las grandes oportunidades que representa el T-MEC y su búsqueda de una mayor integración regional para reducir su dependencia estratégica de Asia y otros bloques comerciales”, señaló Miguel Rincón Arredondo, presidente de Bio Pappel.
En junio de 2019, la compañía mexicana anunció la adquisición de un 55% de la firma estadounidense US Corrugated Co. Ocho meses después, incrementó su participación a 80%. En aquel momento, la empresa comentó que esta acción le permitiría beneficiarse del T-MEC y su mercado potencial de 1,000 billones de dólares.
Además, anunció que ampliaría su presencia en California, Georgia, New Jersey e Indiana, sede en la que ya inició operaciones.
Bio Pappel actualmente cuenta con 34 plantas productoras en el país, Estados Unidos y Sudamérica, lo que le permite generar 20,000 empleos, de los cuales 12,839 son directores y alrededor de 8,000 están estrechamente vinculados a sus operaciones cotidianas.