Tras haber superado la titánica tarea de crear una vacuna a un año del primer caso confirmado de COVID-19, el mundo se alista para afrontar otro desafío: la distribución de alrededor de 15,000 millones de vacunas en un periodo estimado de 18 meses, a lugares que van de pequeñas comunidades a grandes ciudades de todo tipo, lo que traerá una serie de retos logísticos pocas veces vista.
En México,el Gobierno Federal ha firmado órdenes de compra por 198 millones de vacunas, que comenzarán a aplicarse desde la siguiente semana como parte de la primera de cinco fases de distribución, que priorizarán al personal médico, y que cerrarán con la aplicación a la población general en una jornada que se extenderá hasta marzo de 2022.
El traslado del producto no es tarea sencilla, y las empresas logísticas advierten de desafíos que pueden poner en riesgo los tiempos de distribución e incluso las condiciones de la misma vacuna.