Tras eso, el Centro Nacional de Control de Gas (Cenagas) decretó una alerta crítica y ordenó a algunas compañías –entre ellas Volkswagen– reducir el uso del energético.
La última medida se sumó a los cortes programados a los usuarios domésticos de algunas entidades del país.
Hace unos días, la compañía anunció que pararía la producción de su modelo Jetta hasta hoy viernes, para cumplir con la solicitud de reducir el consumo del combustible. Este viernes también paró la producción de los modelos Taos y Golf.
Volkswagen dijo el miércoles pasado que el personal que labora en los segmentos afectados por el corte de gas natural entrará en un esquema de paro técnico.
Este viernes comenzaron a llegar los buques de gas licuado comprados por el gobierno federal para compensar la falta de importaciones e inyectar combustible al sistema de transporte y almacenamiento nacional integrado de gas natural.
Hasta ahora no se ha dado a conocer cuándo se reanudará la oferta suficiente para el funcionamiento de algunas compañías.