La reapertura de las plantas ocurrió en los últimos días de mayo, por lo que las plantas apenas ensamblaron 22,862 unidades, cuando la producción mensual ronda los 300,000 vehículos.
En mayo de este año, los fabricantes ensamblaron 241,442 vehículos, cifra que aún está por debajo de los niveles previos a la pandemia, debido a los estragos de la crisis sanitaria y a los paros por la escasez de semiconductores.
En México, las plantas de General Motors, Stellantis y Volkswagen son, por mucho, las más afectadas por el desabasto de chips, según datos de la Industria Nacional de Autopartes. También Nissan, Honda y Toyota han tenido que parar la producción de unidades por algunos días debido a la falta de semiconductores.
Entre enero y mayo, los fabricantes de vehículos acumulan 1.33 millones de unidades, 38.7% más que en el mismo periodo de 2020. Las exportaciones acumuladas suman 1.17 millones de unidades, 37% más que en los primeros cinco meses del año pasado.