También pone de manifiesto los retos a los que se enfrentan los fabricantes de automóviles a medida que se adaptan a la revolución verde, que obliga a la industria a alejarse de los motores de combustión y a adoptar nuevas tecnologías, desde las baterías hasta la conectividad y la conducción autónoma.
"Un tipo que hizo su tesis sobre los quarks cuánticos y tiene cientos de patentes a su nombre (...) ¿dirigiendo Ferrari? Vivimos tiempos extraordinarios", dijeron analistas de Morgan Stanley.
A lo largo de los años, la división de negocios de Vigna en ST ha liderado los movimientos de la compañía franco-italiana en sensores ambientales, industriales y de automoción, entre otros.
"Sus conocimientos únicos, adquiridos a lo largo de 26 años de trabajo en el corazón de la industria de los semiconductores, que está transformando rápidamente el sector de la automoción, acelerarán la capacidad de Ferrari para ser pionera en la aplicación de tecnologías de próxima generación", dijo Ferrari.
Con automóviles que cuestan más de 200,000 euros (244,000 dólares), los inversores suelen considerar a Ferrari más como una empresa de lujo que como un especialista en vehículos, y se había especulado con que su próximo director general podría proceder del mundo de los bienes de consumo.
El nombramiento de Vigna cubre una vacante de seis meses al frente de la empresa, después de que el anterior presidente ejecutivo, Louis Camilleri, se retiró en diciembre por motivos personales.
El presidente John Elkann, vástago de la familia Agnelli que controla Ferrari a través de su firma de inversión Exor, dijo que el profundo conocimiento de Vigna de las tecnologías que impulsan gran parte del cambio en la industria del automóvil reforzaría a Ferrari.