Para iniciar el 2022 con una producción promedio por encima de los 1.8 millones de barriles, la producción nacional de petróleo tendría que subir en alrededor de 10% en lo que resta del año, un escenario aparentemente complicado debido al último incidente en la plataforma de Ku Maloob Zaap. La estimación, dice el documento de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), hace "mayor énfasis en la eficiencia en lugar del volumen por parte de Petróleos Mexicanos".
Víctor Gómez Ayala, analista del sector, dice que el aumento en los ingresos que se esperan de Pemex pueden explicarse por la venta de otros hidrocarburos, más allá del petróleo crudo, aunque asegura que la meta impuesta para 2022 podría quedar lejana. "No van a crecer la plataforma de producción más de 200,000 barriles en promedio en un año, tomando en cuenta además el problema que tuvieron con Ku Maloob Zaap", explica.
Además, el Fondo Mexicano del Petróleo, del que el gobierno federal prevé recibir cerca de 370,000 millones de pesos el año próximo –un aumento nominal de 8.1%–, depende en su mayoría del impuesto DUC que paga la estatal Pemex.
De 2015 a 2020, esta tasa representó el 85% de todos los ingresos que recibió el FMP, de acuerdo con estimaciones del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria. Así, el principal ingreso del fondo ha quedado reducido, pero con altas expectativas sobre los ingresos que desde éste se deberán transferir a la hacienda pública.
El presidente ha asegurado que la estatal mexicana generaría los ingresos suficientes para financiar la segunda parte de su sexenio, pero hasta ahora los apoyos derivados de su administración no han mostrado una mejora en la operación de la compañía.
La SHCP espera un ingreso más alto por ventas de hidrocarburos, pero sin elementos que realmente supongan ese aumento de manera certera. Cumplir o no la expectativa, dicen los analistas consultados, dependerá más de "eventos externos", como la recuperación de las ventas, los acuerdos de la Organización de los Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y el precio internacional de crudo.
"La variable de decisión más importante va a ser el precio y ahí es muy difícil pronosticar que efectivamente va a estar en 55 dólares. Y es todavía más difícil porque no sabemos cómo se va a dar la recuperación de la demanda de los energéticos", dice Jesús Carrillo, académico del Colegio de México.