Nike incumplió con las estimaciones de ingresos trimestrales, señalando una demanda más débil de lo esperado mientras lucha con una crisis en la cadena de suministro en Vietnam antes de la crucial temporada de compras navideñas.
Las acciones de la compañía con sede en Beaverton, Oregón, que han bajado alrededor de un 9% desde su récord registrado en agosto, inicialmente cayeron un 3% en las operaciones posteriores al cierre para luego reducir las pérdidas a un 1,5%.
El cierre de fábricas durante meses en Vietnam, donde se elabora aproximadamente la mitad de todo el calzado Nike, han acumulado más presión sobre las cadenas de suministro globales, que ya se están tambaleando por el impacto de la pandemia.