Si esto vuelve a ocurrir, Javier Juárez Mojica, actual comisionado del IFT, sería el nuevo presidente interino del Instituto, debido a que es el funcionario con mayor antigüedad dentro del Pleno del Instituto, al contar con seis años en funciones.
Sin embargo, aún con Javier Juárez Mojica al frente, el pleno del IFT tendría solo cuatro comisionados de siete, debido a que el Instituto lleva más de año y medio con dos plazas vacantes para comisionadas. En diciembre de 2021 el Comité de Evaluación publicó la lista de las cinco aspirantes para ocupar dichas plazas, pero el presidente Andrés Manuel López Obrador no ha elegido ningún perfil. Esta situación pone en riesgo varias facultades del IFT, como la emisión de resoluciones de barreras a la competencia, o las disposiciones regulatorias. Además se podría frenar su reglamento interior, con lo que tampoco podría establecer directrices ni lineamientos técnicos.
“Existe en el estatuto una regla que se refiere al tema del quórum y habla de que tiene que haber un quórum de cuatro comisionados, el problema es que si hubiera alguien que se tuviera que excusar, alguien podría argumentar que no hay quórum”, advirtió Lucía Ojeda, socia en la firma mexicana SAI Derecho & Economía y experta en competencia económica.
Aunque el IFT no podrá realizar ciertas funciones, un pleno de cuatro comisionados sí tendría aún facultades para emitir medias de preponderancia, fusiones de empresas, otorgar concesiones, lanzar licitaciones, entre otras. El propio Instituto aseguró en diciembre del año pasado que buscaría modificar su estatuto interno para que no les afecte tanto al desempeño de sus funciones el contar solo con cuatro comisionados.
Este año, el IFT contempla implementar obligaciones específicas a Televisa por haber sido declarado agente económico con poder sustancial en 35 mercados relevantes de televisión restringida de México en 2020. También planea lanzar una licitación para bandas de espectro que son idóneas para 5G.
Para Ojeda la ausencia de un pronunciamiento por parte del Ejecutivo sobre quienes deberán ocupar estos cargos no es coincidencia.
“No hay mucho interés por permitir que ejerzan sus funciones de manera plena. Cofece ha emprendido una controversia constitucional por la falta de nombramientos de comisionados, y este podría ser un camino que podría seguir el IFT”; asegura la especialista. "Es una pena tener un órgano constitucional autónomo con facultades mermadas. No le permites ejercer a su máximo esplendor, es difícil que puedas criticar al pleno porque al final del día lo tienes atado de manos, eres corresponsable de que no funcione", concluye.