Las aerolíneas gozaron de un espacio para aumentar su presencia en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) en el último par de años, pero esto podría estar por cambiar. Con una nueva declaratoria de saturación, en esta ocasión en los edificios terminales del aeropuerto, las bases para asignar los horarios de aterrizaje y despegue –también conocidos como slots– podrían endurecerse, lo que limitaría a las aerolíneas para sumar nuevas rutas y frecuencias.
La pelea por los slots en el AICM antes de la pandemia ya era un problema. La entrada de nuevos vuelos y aerolíneas se dificultaba a causa de la falta de franjas horarias, específicamente en horarios atractivos, que no fueran los nocturnos.
Sin embargo, la salida de operaciones de Interjet –que tenía más de 50,000 slots en el AICM– dejó una ventana de oportunidad que otras aerolíneas no dejaron ir, como fue el caso de Aeroméxico (cuyos slots aumentaron en 18% en la temporada de invierno de 2021 respecto a 2019), Viva Aerobus (que creció en más del doble en horarios) y Volaris, con 40% más slots.