Este año, el Vive Latino no tuvo cancelaciones de artistas que dieran positivo en los test de coronavirus, como ocurrió el año pasado con el Corona Capital. Tampoco se vio afectado por la cancelación de vuelos por el cierre de fronteras, como sí ocurrió en la edición de 2020.
El semáforo verde para los conciertos no solo significa un respiro para los asistentes, sino también para las empresas que hay detrás, como OCESA, que pertenece a Corporación Interamericana de Entretenimiento (CIE), que vio afectados sus ingresos en los dos últimos años por la suspensión de eventos deportivos, salas de teatro y conciertos.
La recuperación avanza a paso lento. Grupo CIE, que organiza el Gran Premio de México de la Fórmula 1, este año sumará a su cartelera otros festivales musicales, como el Pa'l Norte y el Corona Capital, parece tener el viento a favor.
“La apertura definitivamente les va a cambiar la vida, después de estos años sumamente complejos para ellos. Pero recuperar los niveles prepandemia quizá va a tomar un par de años más”, dice Carlos Hermosillo, analista bursátil independiente.
En 2021, la empresa que preside Luis Alejandro Sobrerón Kuri, incrementó sus ingresos 10% a 4,128 millones de pesos. Aunque la cifra quedó 64% por debajo de los 11,709 millones de pesos de facturación de 2019.
Para Hermosillo, el principal reto frente a la recuperación será demostrar y convencer al cliente que los eventos son espacios seguros en términos de higiene y cumplimiento de las normas sanitarias.
Después del confinamiento... la inflación
La industria del entretenimiento no será la misma después de la emergencia sanitaria en medio del golpe a los bolsillos y los cierres definitivos de foros que no lograron sobrevivir a la crisis, aunque por ahora, la incertidumbre se comienza a disparar.
Foros más pequeños, como el Indie Rocks, han retomado los conciertos (con medidas obligatorias, como el uso de cubrebocas), mientras otros, como SALA, están cerrados de forma temporal. En tanto, promotores y organizadores retoman actividades en medio de la incertidumbre que la pandemia dejó en el sector, después de casi dos años sin actividad.
“Nunca, nunca pudimos ver el tamaño de la pandemia, no pudimos visualizar el gran impacto que iba a tener y ese fue nuestro primer gran problema. El segundo fue que no tuvimos ninguna opción durante muchos meses para poder generar dinero, más allá de los streaming, que en la mayoría se lo quedaron las grandes marcas”, declara, Alejandro Jaramillo, director de Orange Gigs, una agencia promotora de eventos.
El promotor explica que la buena relación con los foros y los artistas permitió hacer reprogramaciones y coordinar la calendarización de eventos para reducir las pérdidas, aunque hay gastos, como los publicitarios, que ya no se pudieron recuperar. Esto ha implicado que todos redujeron sus ingresos. En tanto, las ganancias por eventos de streaming representaron menos del 10% de los eventos presenciales que se tenían antes de la pandemia.
“La única manera en la que vamos a salir adelante de esta crisis es poniendo todos de nuestra parte. Nos hemos adaptado, desde los promotores que reducimos nuestras ganancias, hasta los foros reduciendo las rentas en beneficio de que haya shows y que el dinero vuelva a circular”, considera Jaramillo.
Othon Zapata, director de agencia Oveja Negra, comenta que tras la pandemia han tratado de adaptarse a las opciones que se han ido dando para la reactivación de los eventos, que se mantienen con aforos reducidos en espacios cerrados (lo que encarece los boletos) y echar a andar conceptos al aire libre, como Béisbol Rocks, un torneo al aire libre en el que compiten artistas, que ya tiene un alcance nacional.
“Ahorita estamos como cuando abres la puerta de un encierro y siento que todo mundo se está arrojando muy rápido a hacer cosas. Pero hay que ser un poco cautelosos”, dice el promotor, “El tema ahora va hacia un reajuste de los costos de todas las partes, es un momento de adaptación para poder seguir adelante”, añade.
Por ahora, con el aumento generalizado en los precios a causa de la inflación, la industria musical enfrentará otro bache en el camino de la recuperación. “Competir por el bolsillo del consumidor en un ambiente de poco crecimiento y elevada inflación va a ser todo un tema este año, seguramente el punto crítico para un regreso completo de las actividades, y la razón por la cual veo una recuperación más gradual”, dice Hermosillo.
