La estatal CFE reclama un pago de 190.2 millones de dólares a la española Iberdrola dentro de un proceso de arbitraje internacional que abrió la compañía privada el año pasado.
El proceso, que data de marzo pasado, tiene como centro de la disputa a Topolobampo III, una central de ciclo combinado adjudicada a Iberdrola en 2017 para proveer de electricidad a la empresa nacional.
La construcción de la central ya ha sido concluida, pero no ha entrado en operaciones porque la compañía española no ha recibido los documentos necesarios para las pruebas de operación comercial, explicaron hace unos meses fuentes a Expansión. En el informe de Iberdrola no se menciona si el pago a la CFE podría implicar la entrada en marcha de la planta de gas natural.
La CFE condicionó la entrada en operación de la central ubicada en Sinaloa al pago de una multa de 16 millones de dólares. Iberdrola, que decidió escalar el proceso judicial, pide que la compañía estatal reconozca que la planta eléctrica no ha entrado en funcionamiento por "causas de fuerza mayor" y que la estatal declare como incorrecta la sanción que decidió interponer.