Glencore obtuvo de manera impropia información confidencial sobre el gigante estatal Petróleos Mexicanos y lo usó para obtener una ventaja en el comercio de combustible búnker, según una orden de la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos (CFTC, por sus siglas en inglés) emitida el martes.
El gigante de productos básicos se apropió indebidamente de información no pública de empleados y agentes de ciertas empresas estatales, incluida la de México, según el documento. La orden del martes se produjo cuando Glencore admitió sobornos y manipulación del mercado y dijo que pagará alrededor de 1,500 millones de dólares para resolver investigaciones de años en Estados Unidos, Reino Unido y Brasil.
Un representante de Pemex no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Glencore comerciaba combustible búnker generalmente con usuarios finales como propietarios de barcos y tenía “numerosos intercambios de carga” con la compañía petrolera estatal de México “incluidos aquellos para la entrega hacia y desde el mercado de Los Ángeles”, dice la orden. Señaló que un operador sénior, conocido como “Comerciante-1” y con sede en San Francisco, participó y supervisó estos intercambios.