¿En qué año salió el primer Vocho mexicano?
Un año después de que Volkswagen de México se constituyó como una empresa en 1964, comenzó la construcción de la planta de Puebla, en donde se producirían varios de los iconos de la marca, como la combi, el Golf y el vocho. La producción de este último modelo comenzó en 1967 e igual que pasó en Alemania, pronto se posicionó en el mercado mexicano como ‘un coche del pueblo’ por su fácil reparación, accesibilidad y capacidad para andar en cualquier terreno.

Aunque en Europa el modelo fue reemplazado desde los años 70 por el Golf, la corporación prolongó su producción en la fábrica de Puebla durante casi cuatro décadas, hasta 2003, debido al éxito del modelo en México. Según Volkswagen, la planta de Puebla es la que ha producido el modelo por más tiempo, acumulando un volumen de 1,691,542 escarabajos, otro de los nombres con los que se conoce al modelo.
La última unidad del vocho que se produjo en México se encuentra exhibida en el museo del Grupo Volkswagen, Autostadt, en Wolfsburg, Alemania. La pieza, de color azul cielo, tiene en el parabrisas la leyenda “Volkswagen de México. Último sedán del mundo, 30 de julio de 2003”.
¿Se escribe Bocho o Vocho?
El nombre original del vocho fue Volkswagen Tipo 1, pero, según la marca, su apodo se deriva de la contracción de la palabra Volkswagen.
Otra teoría es que el nombre tiene su origen en el apodo con el que los franceses llamaban a los alemanes, “boches”, durante las guerras mundiales en Europa, y cuando Volkswagen llega a México, “los mexicanos designaron este apodo al vehículo, ignorando el significado de la palabra original”, explica la marca en su web.
Las diferentes explicaciones sobre el origen del mote han generado diferencias en su escritura, siendo ambas, ‘vocho’ y ‘bocho’, aceptadas por la marca.
¿El fin de una era?
Pocos modelos han logrado perdurar tanto en el mercado como el vocho, que estuvo disponible durante poco más de 60 años, desde su lanzamiento en 1938 y hasta el fin de su producción en la planta de Puebla en 2003. “Pero los tiempos cambian y se necesita adaptarse a ellos”, dice Volkswagen, que en 1997, decidió presentar una evolución del modelo: el New Beetle.

El nuevo modelo fue un éxito. Cuando su producción inició en 1997 en la planta de Puebla, solo se producían 60 unidades diarias, pero la popularidad que el modelo ganó en los diferentes mercados en los que se lanzó, impulsó a la planta a elevar la producción diaria hasta las 650.
Volkswagen vendió 1,300,000 unidades de esta reinterpretación del vocho durante los 22 años que el modelo estuvo disponible en el mercado, hasta mediados de 2019, cuando la marca despidió al modelo con una edición limitada a 565 unidades, denominada Final Edition, con un precio de 410,065 pesos.
Un eléctrico chino con cara de vocho
Desde que el New Beetle salió del mercado, los fans del modelo han esperado ansiosos alguna señal de la marca alemana que indique que está trabajando en una nueva iteración del vocho. Pero en medio de la indecisión de Volkswagen de resucitar a uno de sus modelos más emblemáticos como un eléctrico -así como lo ha hecho con su combi eléctrica ID Buzz-, una joven marca china ya ha intentado hacerlo.
Una versión eléctrica del icónico modelo podría llegar próximamente a los mercados, aunque no con el logotipo del fabricante alemán, sino con el de la marca china ORA Motor, propiedad del conglomerado Great Wall Motors.

Great Wall Motors lanzó a Ora Motors en agosto de 2018 como una marca de vehículos eléctricos y en 2021 presentó en el Salón del Automóvil de Shanghái un modelo eléctrico con una estética muy similar a la del Beetle. Las fotografías del Punk Cat, un vehículo de cuatro puertas, asientos de cuero blanco, salpicaderos cromados y de madera y pantallas digitales, han dado la vuelta al mundo debido a las similitudes con el icónico modelo de Volkswagen.
Tras la revelación del modelo, la matriz de Volkswagen hizo pública una postura: "Como siempre, verificamos cualquier violación de los derechos de diseño o modelo de utilidad de Volkswagen AG y nos reservamos el derecho de emprender las acciones legales necesarias".
En búsqueda de un nuevo ícono
Holger Nestler, CEO y presidente de Volkswagen de México, dijo en una entrevista en 2021 que “una de las grandes cosas” que quería lograr en el país era crear un nuevo ícono como lo fue el Beetle (vocho). “Cuando vas a Alemania o China y preguntas por Beetle, inmediatamente todos dicen: México. Ahora hablas de la fábrica de Puebla y te dicen: una planta con costos competitivos y desde la cual exportamos”, dijo.
“Pero yo quiero cambiar esto, quiero que de nuevo nos relacionen con un ícono”.