El documento Evolución y cambio en la oferta de servicios de telecomunicaciones de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) detalla que en México el servicio de telefonía fija se desarrolló partir de 1878, cuando se realizó la primera llamada en la Ciudad de México, dos años después de haberse registrado la patente del teléfono por la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos.
La infraestructura de este nuevo servicio llegó de la mano de dos empresas: la Compañía Telefónica Mexicana (también conocida como “La Mexicana”) y Teléfonos Ericsson, que, de acuerdo con El Mirador de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, se disputaron la preferencia del público hasta mediados del siglo XX.
Las redes de dichas empresas no se encontraban conectadas, por lo que los clientes de una, no podían hablar con los que estaban con la competencia.
Años más tarde, estas empresas darían paso a la creación de Telmex. En 1947 se crea Teléfonos de México (Telmex), conformado por inversionistas mexicanos (51.25%) y por la Compañía Mexicana. Tres años después adquirieron los negocios de Telephone and Telegraph Company22, haciendo que Telmex se posicionara como la compañía dominante de la telefonía fija, de acuerdo con el texto Evolución y cambio en la oferta de servicios de telecomunicaciones.
El material señala que Telmex fue adquirida por el gobierno federal en 1972, cuando existían poco más de un millón de líneas telefónicas.
La compañía estuvo en manos del gobierno 18 años. En 1990 fue vendida a capitales privados pertenecientes a América Móvil. Estos pertenecían a América Móvil, que también adquirió a Teléfonos del Noroeste (Telnor), una empresa del gobierno controlada por Telmex. La concesión de Telnor se había otorgado en 1980 y solo podía prestar servicios de telefonía pública en Baja California y Sonora.