La lista no para. En el mismo periodo, el precio del queso oaxaca, uno de los ingredientes que más se utiliza para las quesadillas, aumentó 20%. Le siguen el pollo, con 11.78%; la carne de puerco, con 12.46%, y la de res, con 7.29%, aunque estos no son los únicos insumos que se utilizan para las quesadillas.
Para mitigar el impacto, ‘Doña Mago’, que además de las quesadillas vende tacos de bistec de res, cerdo y de pechuga de pollo, optó por añadir a su menú tacos de guisado y café de olla, cuya preparación es más barata y le resulta una opción para compensar las alzas.
“Aumenté un peso en noviembre. En el año sólo los subí dos veces, y así hay clientes que se molestan y otros que entienden porque se dan cuenta que todo está más caro. Lo que sí es que ya no doy todo al mismo precio porque salgo perdiendo”, dice la encargada del puesto.
En la taquería “El Parral”, que está a unas cuantas calles del puesto de quesadillas, aumentó en un peso el precio de sus tacos, que durante todo el año estuvieron entre 12 y 24 pesos, según la carne del taco. “Todo comienza a subir en enero y nosotros sólo un poco a esto porque ya sabemos cuanto nos suben en la Central (de Abastos)”, dice Consuelo Lara, quien se encarga de cobrar.
En la taquería, que se encuentra en las calles de la colonia Peralvillo, desde el inicio del año comenzaron a lidiar con las alzas en el precio del limón, que en enero tuvo un incremento de 66.7%. Sin embargo, el precio se estabilizó en los siguientes meses y hacia el cierre de este año.
“Las carnes varían de precio, pero todas subieron. También los refrescos, la cebolla y hasta el aceite. Nos habíamos aguantado, pero no podíamos mantener el precio todo el año”, dice ‘La Güera’, como le llaman los asiduos a la taqueria que hace 50 años fundó su papá.
También los servicios
Los incrementos en los precios no solo se dan en los alimentos, sino en otros rubros que afectan a unidades como las cocinas económicas. Ángeles Rodríguez, cocinera y administradora de una cocina económica en el mercado San Joaquín, en la colonia Peralvillo, cuenta que uno de los incrementos más fuertes ha sido en el gas.
“Tenía un proveedor que intentó no subirnos, pero al final sí tenemos que pagar más. Si no hay gas, pues no se puede cocinar. La luz se paga de forma conjunta, y hasta ahora no nos han dicho si pagaremos más por la temporada, porque ya están los puestos de los árboles y las series por Navidad”, dice.
Rodriguez dice que el precio del gas aumentó cerca de 10%, aunque en el IPyC, el Inegi establece que bajó 5.68% entre diciembre de 2021 y el pasado noviembre. La energía eléctrica tuvo un incremento de 0.99%.
Por ahora, Ángeles no prevé tener un aumento en el precio de su menú, que es de 65 pesos por comida, para no perder comensales. “El precio de la comida aquí en el mercado lo tenemos igual, no puedo subirlo si las demás cocinas se quedan en el mismo precio”, comenta.