Elena Estavillo, excomisionada del Instituto, considera que de avalarse la propuesta, el IFT tendría como primer reto vigilar que el probable comprador no genere una concentración en el mercado. Y es que los principales interesados en adquirir la operación de Telmex podría ser una de las mismas empresas del sector, por ejemplo, Televisa.
“Desde hace mucho tiempo se coquetea con la idea que en México sería mucho mejor un duopolio que sólo uno, porque se piensa que se podría competir inmediatamente pero eso no funciona así, los duopolios tienden a comportarse como monopolios porque son muchos incentivos y dinámicas que llegan a él. Y un camino por ahí tampoco nos ayudaría a solucionar el problema”, advierte la exfuncionaria del órgano regulador de las telecomunicaciones.
El principal riesgo de crear monopolios en una nación es la calidad de los servicios, porque son las empresas que menos invierten, innovan y emiten tarifas más elevadas. “(Los monopolios) tienen muchos recursos y enriquecen a sus accionistas pero no mejoran el bienestar de los consumidores. Y lo que se requiere es competencia”, dice Estavillo.
Al cierre de 2022, la industria de las telecomunicaciones reportó ingresos por 155,634 millones de pesos, de los cuales el 38.9% fueron para Telcel y el 17.9% para Telmex, de acuerdo con datos del IFT. Mientras que la inversión total del sector fue 96,496 millones de pesos, de los cuales América Móvil desembolsó 6, 270 millones de pesos.
La excomisonada recordó que no es la primera vez que se busca escindir el negocio de Telmex. Hace dos años Teléfonos de México realizó su ‘separación funcional’ para crear una empresa dedicada a ofrecer infraestructura a sus competidores, esto como parte de su regulación, pero “no se cumplieron muchas de las condiciones que había pensado el IFT para generar una mejor competencia por una debilidad de aplicación por parte del regulador”, dice Estavillo.
Los operadores aún acusan a Telmex de evadir medidas regulatorias, como la compartición de infraestructura con sus competidores, al no proporcionar información técnica sobre los accesos de su red, esto pese a que ya se dio la separación funcional.
Por ello, Fernando Borjón, excomisionado del Instituto, aseguró que la propuesta debe analizarse con mucho cuidado. América Móvil como sus empresas filiales ya se han habituado a estar bajo una regulación e incluso con la venta podría ser una salida para que América Móvil alegue que ya no es preponderante y con ello solicite su convergencia, es decir, su entrada a Televisión de paga.
El IFT dijo la semana pasada que analizará la propuesta así como los efectos que ha tenido la regulación para determinar si es necesario hacer ajustes en las medidas asimétricas.
Pero para Borjón la situación que enfrenta el Instituto como es el operar con un Pleno incompleto, cuatro de los siete que requiere, complica el análisis que deberán enfrentar porque tendrán menos opiniones sobre si es necesario aplicar una separación estructural en Telmex. "Deberá tomar una decisión complicada y 'arriesgada' por las implicaciones que traerá tanto para la empresa como para el mercado de telecomunicaciones".
“Me preguntaría si la preponderancia es lo que se sigue necesitando o si la que tenemos siguen siendo la correcta y si en algún punto es un impedimento para continuar invirtiendo”, se cuestiona.