El gobierno de México ha decidido expropiar una planta de hidrógeno, ubicada en la refinería de Tula y que era propiedad de una compañía francesa.
La administración federal publicó ayer jueves por la tarde una declaratoria de utilidad pública en el Diario Oficial de la Federación. Así, el gobierno ha declarado el activo operado por la francesa Air Liquide a favor de Pemex Transformación Industrial (Pemex TRI), la filial de la estatal que opera el negocio de refinerías.
La planta de hidrógeno era operada por la compañía desde 2007, cuando ésta y Pemex firmaron un acuerdo que establecía que la primera le suministraría hidrógeno a la refinería durante 20 años. Se trató de la primera alianza estratégica de la petrolera relacionada con esta materia prima.