Como reacción a esa información, las acciones de Tesla cayeron casi 7% en Wall Street a media jornada, interrumpiendo una racha alcista de más de diez sesiones porque este aplazamiento pone en duda uno de los proyectos más importantes del fabricante.
Fue el propio Musk quien había anunciado la presentación a principios de abril en un escueto mensaje en X, su red social, que el vehículo autónomo sería presentado en agosto: "Presentación del robotaxi de Tesla el 8 de agosto", publicó.
"Si bien la reacción instintiva es claramente negativa ante este retraso (...) creemos que el momento de los robotaxis, las asociaciones y la tecnología autónoma basada en la Inteligencia Artificial no cambia en absoluto nuestra opinión positiva sobre Tesla", subrayó Daniel Ives, analista de la consultora Wedbush, en una nota.
El lanzamiento del robotaxi es considerado el inicio de un nuevo capítulo en la historia del fabricante en materia de conducción autónoma.
Pero el desarrollo del vehículo ha tropezado con algunos obstáculos en el pasado, particularmente relacionados con las preocupaciones de las autoridades reguladoras del transporte y y también de los consumidores sobre la seguridad.
Consultada por la AFP, Tesla no respondió de inmediato.
Tesla entregó cerca de 444,000 vehículos en el segundo trimestre en todo el mundo, por encima de las expectativas de los analistas (436,000), pero con una caída interanual del 4.70%.