Hablar de la NOM 236 podría parecer una cuestión del pasado, pero la posibilidad de que esta normativa sobre inspecciones fisicomecánicas resurja, está ganando terreno una vez más en la agenda de la industria automotriz.
Publicada en el Diario Oficial de la Federación en mayo de 2022, esta norma estaba destinada a regular las inspecciones fisicomecánicas de vehículos ligeros que no excedieran las 3.8 toneladas. Sin embargo, pocos meses después, en noviembre del mismo año, la Secretaría de Economía, bajo el liderazgo de Tatiana Clouthier, decidió cancelarla.
La justificación oficial para su cancelación se centró en el posible impacto económico que la medida podría tener en las familias mexicanas que utilizan sus vehículos como herramientas de trabajo. Clouthier argumentó que la implementación de esta norma podría afectar “negativamente” los ingresos de estas familias, al imponer gastos no previstos para aprobar las inspecciones, incluyendo tanto el costo de la verificación como las reparaciones necesarias para cumplir con los requisitos.
"De esta manera se beneficia a la economía de la población mexicana que cuenta con vehículos de trabajo, familiares y de uso doméstico”, aseveró en su momento. No obstante, la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) ha insistido en la importancia de revivir la NOM 236.