Un proyecto con historia de tropiezos
Lakach, ubicado a unos 90 kilómetros del puerto de Veracruz, contiene aproximadamente 900,000 millones de pies cúbicos de gas. Desde 2007, Pemex ha perforado ocho pozos en el área, pero solo uno está en operación, con baja presión. La petrolera ha invertido 1,400 millones de dólares en el yacimiento y recibió autorización para gastar otros 400 millones.
Sin embargo, el proyecto ha sufrido múltiples reveses. New Fortress Energy, que iba a desarrollar Lakach bajo un acuerdo con Pemex, se retiró en 2023. Ahora, Grupo Carso, de Slim, ha propuesto sumar los yacimientos vecinos Piklis y Kunah para mejorar la rentabilidad, pero las negociaciones siguen en curso.
“Se está analizando (…)”, dijo Slim, sin confirmar si seguirá adelante con el plan. Fuentes cercanas al proceso indicaron a Reuters que Grupo Carso incluso ha considerado congelar su participación o retirarse por completo, en lo que podría ser una estrategia para obtener mejores condiciones.
Factores económicos en contra
El principal obstáculo financiero es el precio del gas. Cuando Pemex planteó originalmente el desarrollo de Lakach, se esperaba que el gas natural cotizara en seis dólares por millón de BTU. Sin embargo, el precio de referencia Henry Hub se encuentra actualmente en torno a tres dólares, un 50% menos de lo proyectado y un tercio menos que hace un año.
Además, el gobierno de Claudia Sheinbaum ha impulsado una estrategia de reducción de la dependencia del gas importado desde Estados Unidos, luego de que el presidente Donald Trump amenazara con aranceles y otras medidas contra México. La crisis energética de 2021, cuando una ola de frío en Texas interrumpió las exportaciones de gas y causó apagones en México, también ha incentivado la búsqueda de mayor producción nacional.
No obstante, la inversión requerida para explotar Lakach de manera rentable sigue siendo un desafío. Pemex busca desarrollar el campo bajo un contrato de servicios, donde los socios financian el proyecto por adelantado, pero el modelo ha sido criticado por su falta de incentivos para los inversionistas privados.
“El contrato se está revisando”
Este miércoles, la presidenta Claudia Sheinbaum confirmó que el contrato entre Pemex y Grupo Carso está bajo revisión.
Con una combinación de obstáculos técnicos, incertidumbre económica y presiones políticas, el futuro de Lakach sigue en el aire. Para Slim, cuya fortuna ronda los 79,000 millones de dólares y que ya ha invertido en otros proyectos energéticos como Zama, Ichalkil y Pokoch, la apuesta por el gas en aguas profundas podría convertirse en su mayor desafío en el sector.
Con información de Reuters