Aunque la inflación en julio se ubicó en 3.51%, la más baja desde diciembre de 2020, los precios de los productos de Nestlé reflejan incrementos acumulados en años anteriores, por lo que no se espera una caída inmediata para los consumidores.
Para contrarrestar este escenario, la compañía ha implementado una estrategia de segmentación. Productos premium y opciones más accesibles coexisten en su portafolio: desde Nescafé Taster Choice hasta Nescafé Dolca o Nescafé de Olla, incluyendo ediciones especiales como Café Reserva o ICE.
La diversidad de productos busca cubrir no solo distintos gustos, sino también diferentes ocasiones de consumo y puntos de venta. En México, los consumidores adquieren productos en más de 20 canales distintos, desde tiendas de barrio hasta supermercados y plataformas digitales.
“La idea es poder estar en todas partes con una oferta accesible para todos los bolsillos”, señala Stowhas. La empresa ajusta presentaciones, tamaños y formatos según cada canal, con el objetivo de mantener su presencia en el mercado.
Los cambios regulatorios también afectan la operación. Desde marzo, productos con sellos de alto contenido de azúcar o grasas dejaron de comercializarse en cooperativas escolares, impactando categorías como dulces, botanas y refrescos.
Nestlé responde a estas restricciones con innovación, adaptando sus productos a tendencias de consumo más saludables y fortaleciendo su portafolio con micronutrientes importantes. “Estamos mejorando continuamente nuestro portafolio, tomando en cuenta las preferencias de los consumidores tanto locales como globales”, comenta Stowhas.
El acercamiento digital complementa la estrategia de mercado. Recetas Nestlé, un sitio web que propone platillos que incluyen productos de la marca, funciona como un motor para atraer y fidelizar clientes, integrando los productos a la vida cotidiana de los consumidores.
Aunque México se reporta dentro de la Zona Américas de Nestlé, la región tuvo un primer semestre de ventas a la baja, con una caída de 4.9%, un reflejo de la fragilidad de la confianza del consumidor pese al sólido desempeño de otras divisiones.
En este contexto, la diversificación y la presencia en múltiples canales se vuelven claves para mantener relevancia y ventas, frente a consumidores más exigentes y precios presionados por costos crecientes.
La estrategia de Nestlé combina formatos variados, innovación en productos y herramientas digitales para sostener su vínculo con los consumidores y garantizar que sus marcas sigan presentes en la vida diaria.
Con su portafolio extendido a alimentos y productos para mascotas, la compañía busca equilibrar la caída de ventas en algunas categorías con la estabilidad en otras, mitigando riesgos y adaptándose a la dinámica del mercado mexicano.