Aunque las marcas aún no han revelado la estrategia que seguirán con las nuevas tarifas, desde la perspectiva de Eric Ramírez, director de Urban Science para América Latina y el Caribe, la coyuntura que enfrentan no será menor, pues deberán encontrar una buena hoja de ruta que no les afecten sus volúmenes ni sus ganancias.
“Con aranceles, obviamente va a haber presiones de costo, de precio también y entonces es un dilema, porque si deciden impactar todo el costo extra al precio, el volumen se va a caer… entre la marca y sus distribuidores podrían enfrentar algo (en costos), pero eso no es una condición sustentable o sana para seguir empujando por la adopción de la tecnología”, comenta en entrevista con Expansión.
Con lo anterior, los especialistas esperan que las marcas chinas consoliden su oferta de servicio de posventa para continuar siendo atractivos en el mercado, pese a los nuevos costos que podrían estar teniendo este tipo de unidades en el mercado.
Los aranceles llegan en un momento en que el mercado automotriz estaba comenzando a normalizar sus precios. La pandemia por covid-19, que afectó las cadenas de suministro en México en el mundo, repercutió en los volúmenes de la industria los últimos años, lo que ocasionó una presión de precios al alza, de hasta 16.2% en su momento más crítico, en 2023, de acuerdo con datos de la consultora J.D. Power.
Tras la normalización en las cadenas de proveeduría y con ello, en la oferta, este 2025 el incremento en precios registrados llegó hasta 3.7%, el menor en los últimos cinco años, pero hoy la expectativa es que para 2026 se hable de un incremento entre 6 y 8%, como consecuencia de este mayor proteccionismo en el sector.
En lo que va de este año, se han comercializado en el país un millón 370,188 vehículos nuevos, lo que significa un ligero incremento interanual de 0.9% frente al año pasado. La expectativa es que el año cierre con alrededor de 1.5 millones de unidades comercializadas.
Con los nuevos precios que se esperan para el año entrante y ya sin la demanda rezagada por la pandemia de covid-19, que aún estuvo presente en 2025, las previsiones es que el mercado crezca de manera marginal.
“Seguimos viendo un crecimiento más moderado en el siguiente año, pero crecimiento, que eso siempre es positivo. Lo que sí, es que no será el mismo crecimiento parejo para todas las marcas. Habrá marcas que ya no van a crecer tanto y tendrán que estar repartiéndose el pastel entre más competidores”, comenta en entrevista con Expansión Gerardo Gómez, director general y country manager de J.D. Power México.
Con un mercado automotriz con un panorama hasta ahora incierto sobre cómo afectarán las nuevas tarifas, los especialistas esperan que la colocación de autos totalmente eléctricos descienda, pues al tratarse de nuevas tecnologías, parece arriesgado que el consumidor final se incline por uno de este tipo de vehículos.
La expectativa es que los fabricantes sigan priorizando la venta de autos a gasolina, mientras despuntan los híbridos en sus portafolios, pues esta clase de modelos no sufren el problema de los eléctricos sobre la falta de infraestructura de recarga.
“Todas las condiciones están mandando para que el vehículo híbrido sea el ideal para los países en desarrollo, como México y que sea la opción adecuada. No podemos dar nosotros un paso para brincarnos los híbridos y llegar directamente a los eléctricos como en otros países desarrollados”, añade Gómez.