¿Te han invitado a una inversión en la que te ofrecen miles de pesos en rendimientos en poco tiempo a cambio de que invites a unos amigos a sumarse a este esquema?
¡Cuidado hay un riesgo de fraude!
Este tipo de esquemas son conocidos como estafas piramidales o esquemas ponzi y es un mecanismo informal de inversión o ahorro que puedes encontrar en internet o con amigos y familiares.
Algo que se debe destacar es que este tipo de fraudes pueden hacer caer a cualquier persona, independientemente de su educación financiera y hasta riqueza, pues se dejan deslumbrar por los altos rendimientos que ofrecen.
Consiste en ofrecer altos retornos en poco tiempo, utilizar parte del dinero de los nuevos inversionistas para pagar a los antiguos y dar apariencia de que el negocio funciona.
El sistema marcha hasta el momento en que dejan de entrar nuevas víctimas. Entonces, todo se desploma porque nunca hubo de fondo un verdadero mecanismo de generación de beneficios.
Este tipo de “inversiones” no terminan bien porque conforme se van agregando personas se pierde impulso y termina en un gran fraude y, al final, únicamente los promotores de arriba de la pirámide, es decir, los que inician el negocio, son los únicos que sí reciben los recursos de las personas que participaron después.
La historia de estos fraudes comenzó en la década de los 20 con Charles Ponzi, quien estafó a más de 10,000 residentes de Nueva Inglaterra, Estados Unidos, al ofrecerles invertir en un negocio con rendimientos considerables. Las ganancias prometidas rondaban 50% en tan sólo 90 días.
Si estás tentado a entrar a un esquema de inversión con altas tasas de rendimiento te recordamos tomar las siguientes sugerencias que da la Condusef.
1. Antes de confiar tu dinero a alguna institución, verifica que esté debidamente autorizada y regulada por las autoridades y que cuente con el seguro de depósito.
2. Recuerda que no es seguro ahorrar en tandas o bajo el colchón o en las llamadas pirámides.
3. No involucres a tus familiares o amigos en estas operaciones que son altamente riesgosas.
4. Hay que dudar de aquellas personas que te ofrecen dinero fácil y rápido, con rendimientos muy por encima de lo que se ofrece en el mercado, por ejemplo, actualmente el Cete ronda 11% a tasa anual.
5. Si ya estás en un esquema de este tipo lamentamos decirte que la Condusef no te puede defender, pues no son una institución financiera. Se trata de un esquema informal.
6. Compara y elige la institución financiera que te ofrezca el producto con la mayor tasa de interés y te cobre menos comisiones.
7. Confirma que la institución que elijas tenga una sucursal cerca de tu casa o trabajo para evitar complicaciones.
8. Respecto a operaciones con criptomonedas, la o el usuario debe saber que el activo virtual no es moneda de curso legal y no está respaldado por el Gobierno Federal.
9. Revisa que la institución a la cual le prestarás tu dinero esté registrada ante el Sistema de Prestadores de Servicios Financieros (SIPRES).
