Buscar, comprar, rentar o administrar bienes raíces está cambiando con el desarrollo de la tecnología y una disposición de las nuevas generaciones a hacer casi todo desde su teléfono celular.
Empresas tecnologías que revolucionan al sector inmobiliario
En México y en América Latina han surgido en los últimos años varias empresas tecnológicas dedicadas a solucionar alguna necesidad o un paso específico en el proceso de buscar o adquirir un inmueble.
Y aunque ahora quienes buscan un inmueble, ya prácticamente lo conocen en internet, la asesoría del profesional inmobiliario todavía es indispensable.
Las plataformas conocidas como Ibuyers como Tuhabi, Flat.mx y Lahaus compran viviendas, las remodelan y las vuelven a poner en el mercado de la mano de los agentes inmobiliarios.
El propietario gana con una negociación rápida y adecuada. Generalmente, son viviendas sin problemas legales y con el potencial de venderse a corto plazo.
Estas plataformas crean un ecosistema donde cualquier transacción del inmueble puede realizarse en línea, con una gran experiencia para el usuario y atrayendo nuevos compradores con la propuesta.
También hay plataformas que ofrecen servicios a los agentes inmobiliarios para que desde su teléfono tengan acceso a información de mercado, inventario y puedan compartir en la nube todos los documentos de la propiedad con propietarios y compradores.
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Plataformas como Pads, Neximo.mx, Hubspot Sales, Nuwwe, eXp, Homie, Prontopiso, Wiggot, Vivanuncios, Inmuebles24 y Mercado Libre además ofrecen acompañamiento con equipos profesionales en áreas como formación, marketing, asesoría legal o análisis financiero.
El objetivo es que los asesores sean más productivos y puedan cerrar más negocios en el menor tiempo posible.
Andrea Rodríguez, fundadora de Prop Tech Latam, comentó que México y Brasil son los países más avanzados en el desarrollo de estas plataformas, ya que por el tamaño de sus economías son donde se realiza el mayor número de operaciones inmobiliarias en la región.
“Son los países más a la vanguardia porque también es donde están los fondos de inversión y los proyectos con herramientas de las compañías tecnológicas”, explicó.
Contratos digitales
La tecnología ahora permite obtener consentimientos digitales o firmar documentos sin la presencia física de los firmantes o notarios.
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En México ya se utiliza la firma electrónica avanzada. El SAT certifica las firmas electrónicas avanzadas.
De esta forma, las personas entregan sus datos biométricos, huellas digitales y digitalizan la firma autógrafa. A cambio reciben tres elementos: un archivo .cer, un archivo .key y una contraseña.
Los contratos se suben a plataformas en línea como FIDO y se genera un archivo .xml que es el que contiene el contrato digital.
Con este archivo digital no hace falta la presencia ante un notario público.
Fracciones
Rodríguez agregó que otras dos tendencias que están tomando fuerza entre las empresas tecnológicas son la compra fraccionada de propiedades y la gestión de vivienda en renta.
La tokenización es una nueva alternativa para asesores inmobiliarios, ya que al tokenizar un activo inmobiliario, desde un edificio hasta un departamento o una casa, se crean fracciones digitales de dicho activo.
Este proceso convierte las fracciones en activos digitales, que se pueden negociar y comercializar de forma rápida y segura, con una trazabilidad garantizada por el uso del blockchain.
Esta opción incluye al crowfunding inmobiliario donde un grupo de pequeños inversionistas utilizan una plataforma para comprar un activo: residencial, oficinas, logística o terrenos, que luego se opera y genera dividendos.
Algunas plataformas de inversión inmobiliaria mediante fracciones son MountX Real Estate Capital o Capitalizarme.com
Cada propiedad se vende en un esquema de 8 a 10 fracciones. Los copropietarios reciben una ganancia sobre la comercialización del espacio y tienen la posibilidad de disfrutar del inmueble con descuentos especiales.
En el caso de las plataformas para rentar, estas ayudan a que se pueda rentar más rápido el inmueble, ofrecen recorridos virtuales, se organizan visitas presenciales, se califica a los potenciales inquilinos y se resguarda y administra la cobranza.