Alba, de 40 años, fundó el negocio en 2011, motivada por la escasez de productos para bebés libres de productos químicos perjudiciales. La compañía, neutral en carbono, fabrica pañales, toallitas, champú y lociones que considera “limpias y naturales”, y apunta a una base de clientes de padres que son conscientes del medio ambiente, aspiracionales y relativamente adinerados. Honest tuvo ingresos de aproximadamente 301 millones de dólares en 2020, un aumento de 28% con respecto al año anterior y una pérdida operativa de 13.5 millones de dólares.
Inusual ejemplo
La compañía, con sede en Los Ángeles, ahora está valorada en 1,890 millones de dólares o 2,220 millones de dólares cuando se diluye completamente el valor para incluir opciones de acciones para empleados y unidades de acciones restringidas. Esa suma es significativamente superior que la valoración implícita de 860 millones de dólares en una ronda de financiación de 2017, según Pitchbook. Honest se ha visto afectada anteriormente por el retiro de productos y la controversia sobre sus afirmaciones de usar solo ingredientes naturales. Antes de esos problemas, se valoró en 1,700 millones de dólares en una ronda de financiación de 2015.
La OPI marca un retorno de 220% para L Catterton, firma de capital privado respaldada por el multimillonario Bernard Arnault, que invirtió 200 millones de dólares en 2018. La compañía vendió aproximadamente la mitad de su participación en la oferta.
La actriz es un raro ejemplo de alguien que une con éxito una carrera entre Hollywood y Wall Street. Si bien muchas celebridades logran acuerdos de licencia para líneas de moda o productos como perfumes o vodka, pocas han fundado empresas que cotizan en Bolsa.
Alba, cuyo título oficial es directora creativa, continúa trabajando como actriz y recientemente protagonizó la serie de televisión criminal “L.A.’s Finest”.