"Muchas organizaciones intentan operar de forma más sostenible y buscan soluciones que les permitan hacerlo", dijo a Reuters Ken Pontarelli, responsable de inversión sostenible para mercados privados de Goldman Sachs Asset Management.
Hasta la fecha, el fondo Horizon de GSAM ha realizado 12 inversiones de entre 80 y 90 millones de dólares, entre ellas Northvolt, una empresa sueca de desarrollo de baterías, y Recover, una empresa que recicla residuos textiles para crear fibras sostenibles.
Según Pontarelli, cada inversión se orienta y se mide en función de resultados específicos de sostenibilidad, como hectáreas de humedales restaurados o toneladas de CO2 retenidas.
Aunque los inversores llevan mucho tiempo invirtiendo en activos reales, como la energía eólica y solar, o en capital riesgo en fase inicial, la demanda del fondo demostró que cada vez estaban más dispuestos a respaldar a empresas más grandes, dijo Pontarelli.
"En 2019 se vio una mayor disposición de los asignadores institucionales a pensar en el clima como un gran tema más allá de solo los activos duros", dijo. "En cada trimestre (desde ese momento) hemos visto más interés de los clientes en y alrededor de este tema".
