El peso mexicano caía el martes por segundo día consecutivo pese al declive del dólar, en medio de un entorno difícil para las monedas de los mercados emergentes ante la preocupación por la economía china, mientras que el desplome del peso argentino también remecía a las divisas de la región.
La moneda mexicana se ha vuelto a situar por encima de la barrera sicológica de 17.00 pesos, si bien ha podido mostrar cierta resistencia en relación a sus pares latinoamericanos ante el optimismo que genera la fortaleza de la economía de Estados Unidos.