Según el banco, su hipótesis de base prevé una ralentización del crecimiento en los países en desarrollo al 3.4% en 2025, frente al 4.1% de este año. En cuanto a los mercados emergentes excluida China, JPMorgan predijo que el crecimiento se moderaría al 3% desde el 3.4%.
La renta fija de los mercados emergentes va a estar en el punto de mira, con el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca y un Congreso republicano que planteaba "dificultades" debido a la política arancelaria, los cambios geopolíticos y la política interna de Estados Unidos que tienden a un dólar más fuerte, así como a tasas de interés más altas.
El banco de Wall Street predijo que los fondos de bonos dedicados a los mercados emergentes sufrirían salidas de entre 5,000 y 15,000 millones de dólares el próximo año.
"El impacto de la política estadounidense sobre la confianza hacia los mercados emergentes será probablemente el principal lastre, aunque el efecto retardado de la relajación de la Reserva Federal compensará en cierta medida", escribieron los analistas de JPMorgan.
El banco dijo que espera que la deuda soberana en divisas fuertes rindiera un 4.3% a finales de 2025, frente al 6.9% en lo que va de este año.
"El futuro de los mercados emergentes en 2025 parece que será más agitado, aunque afectará a una clase de activos ya curtida en mil batallas", dijo JPMorgan.