Los volúmenes de negociación fueron escasos el jueves debido a un feriado federal en Estados Unidos.
El conflicto entró en su séptimo día el jueves, después de que Israel atacara instalaciones nucleares de Irán y de que misiles iraníes alcanzaran un hospital israelí.
Tony Sycamore, analista de la plataforma de negociación IG, dijo que el precio sigue teniendo una "saludable prima de riesgo, ya que los operadores esperan a ver si la siguiente fase del conflicto entre Israel e Irán es un ataque estadounidense o conversaciones de paz".
Goldman Sachs dijo el miércoles que una prima de riesgo geopolítico de alrededor de 10 dólares por barril está justificada, dada la menor oferta iraní y el riesgo de una interrupción más amplia que podría empujar el crudo Brent por encima de 90 dólares.
Incluso si las tensiones en Oriente Medio se calmaran en los próximos días, es probable que los precios del petróleo no vuelvan a situarse en el rango de 60 dólares en que cotizaban hace un mes, dijo Phil Flynn, analista senior de Price Futures Group.
Trump dijo a periodistas el miércoles que aún no había decidido si Estados Unidos se unirá a Israel en sus ataques contra Irán. Irán es el tercer mayor productor entre los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, con una extracción de unos 3.3 millones de barriles diarios (bpd) de crudo.
Por el estrecho de Ormuz, situado en la costa meridional de Irán, circulan entre 18 millones y 21 millones de barriles diarios de petróleo y productos derivados, y existe una preocupación generalizada por la posibilidad de que los combates interrumpan los flujos comerciales.
El máximo responsable ruso del sector petrolero afirmó el jueves que los productores de petróleo de la OPEP+ deberían seguir adelante con sus planes de aumentar la producción, teniendo en cuenta el aumento de la demanda en verano boreal.