La imagen que es capaz de levantar o destruir una campaña política

Para David Ross, el retrato político es el elemento más importante y determinante en una campaña electoral. El fotógrafo que ha capturado a personajes como Eruviel Ávila, Alfredo Del Mazo e Ivonne Ortega asegura que una fotografía tiene el poder de cautivar o generar repulsión en el electorado.

“Los ciudadanos toman más decisiones emocionales que racionales. Y como la fotografía conecta directamente con los sentimientos, cuando ven una imagen donde el protagonista luce incómodo y, en lugar de una sonrisa sólo hace una mueca, automáticamente la rechazan y refuerzan su idea de no votar por ese candidato”, explica.

Es más probable que una persona recuerde la antipatía de un político por una imagen que vio, que por un encuentro presencial, señala Ulises Castellanos, fotoperiodista y director del centro de producción y asesoría de imagen Círculo Rojo. El especialista agrega que las capturas donde el candidato luce informal, distraído, enojado o hasta triste son las que terminan siendo contraproducentes para las campañas. Incluso, acaban convertidas en memes.

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“Este es un terreno muy peligroso, sobre todo para los candidatos que lideran las encuestas, ya que una fotografía transformada genera burla y reduce su credibilidad”, indica Federico Gama, fotógrafo independiente que ha retratado a Ernesto Zedillo, Cuauhtémoc Cárdenas y Vicente Fox. Aunque dice que, con aquellos políticos que no son tan conocidos, el efecto es contrario, pues eleva su popularidad en el electorado.

El poder de una fotografía

Castellanos menciona que ‘vender’ a un candidato presidencial a través de la fotografía es complicado. “Las imágenes oficiales son acartonadas, el presidenciable está serio y eso lo aleja de la sociedad. Nosotros tenemos el reto de capturar la esencia del individuo para que conecte con la comunidad”, detalla.

La clave está en difundir una imagen lo más neutral posible, que vaya acorde al público al que va dirigido.

Esto hace Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición ‘Juntos Haremos Historia’. El político se mantiene fiel a su tradición, no se produce en exceso y se muestra tal como es, espontáneo y natural, lo que le permite generar confianza en las diferentes comunidades que visita.

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Ricardo Anaya –candidato de la coalición ‘Por México Al Frente’–maneja una imagen coherente, dice el director Círculo Rojo. Tanto su discurso, como sus fotografías difundidas van dirigidas a un público joven. “El look and feel de Anaya es bastante informal, utiliza colores modernos que lo hacen empatar con sus seguidores”, explica Castellanos.

Sin embargo, agrega David Ross, las fotografías en las que el candidato está viendo hacia arriba, que supuestamente quiere mostrar una forma de mirar el futuro, no le favorecen. Los ciudadanos no interpretan las imágenes, ellos quieren ven a un político y asegurarse de que sea un buen líder. “El retrato tiene que mostrar fuerza y determinación en los ojos, por lo que es importante que observe al frente”.

¿Movimiento en las encuestas?

Aunque es complicado que una imagen modifique la decisión de voto de un elector cautivo, Federico Gama expone que sí hay una influencia directa en los indecisos. Una buena fotografía, que transmita un mensaje, atrapa al ciudadano que sigue sin saber por quién votar. “El día de la elección, sin tener una candidato favorito, recordará la imagen que más le gustó y emitirá su voto”.

Esta podría ser la estrategia ideal para el candidato de la coalición ‘Todos por México’, José Antonio Meade, ya que parece estar encerrado en una burbuja, además de que la gente sigue sin creerle la imagen de ciudadano que quiere difundir, asevera Castellanos.

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“Las fotografías donde el político está sentado o parado y con las luces de frente son manejadas a nivel racional. Decirle que sonría, sin tener un sentimiento genuino de felicidad, es irreal”, agrega Ross.

Respecto a los candidatos independientes, Margarita Zavala y Jaime Rodríguez ‘El Bronco’, los expertos consultados coinciden en que no hay una estrategia de marketing detrás de las fotografías que difunden. “Ambos están desaprovechando el poder de la imagen. En este momento de las campañas, en el que no existen propuestas concretas, deberían, al menos, apostar por generar buenas fotografías”, concluye Castellanos.