Este año, se volvió más importante la humanidad que las ventas. Budweiser, por ejemplo, sacrificó su lugar como la marca mejor valorada por sus anuncios en el Super Bowl antes de fingir que todo estaba bien.
Desde que debutó publicitariamente en el evento deportivo, la marca de cerveza ha obtenido durante ocho veces la mejor puntuación de los espectadores por sus anuncios, los cuales son evaluados a través de una encuesta en vivo que se lleva a cabo en Estados Unidos durante la transmisión del partido, el USA Today Ad Meter. Budweiser es la marca que mejor ha sido calificada en la historia de la encuesta.
"Este ha sido un buen momento para replantearse los propósitos de marca, así como demostrar que no es necesario generar típicos anuncios comerciales para estar en la mente del consumidor. Hoy, el impacto en la gente se da desde un nuevo origen: la empatía y la solidaridad. Algo que no va a desaparecer tan pronto, es un riesgo que muchas marcas aún no corren, pero que sin duda está generando movimientos interesantes en el mercado", refiere Jan Erhardt, cofundador de la agencia Montalvo.
Más empatía y menos ventas
Pero en medio de todo, hay marcas que sí decidieron salir a la cancha. Toyota, Cheetos, Pringles, M&M's, Amazon, General Motors, Walt Disney Studios y McDonald's son algunas de las que decidieron aprovechar esta plataforma para llegar a millones de consumidores.
Esto no quiere decir que no sean empáticas, que no se preocupen por el consumidor o que estén descuidando sus presupuestos. Simplemente aprovecharon la oportunidad que les dejó la salida de otras marcas.
Fiverr, por ejemplo, se estrena como anunciante del evento deportivo este año. "No hay nada más grande que el Super Bowl desde el punto de vista de la marca y el marketing (...) El anuncio llegará al mundo entero. Estamos deseando que todo el mundo vea lo que hemos creado", dijo en un comunicado la empresa que ayuda a las pymes y a los emprendedores a construir su marca.