Fiscal de EU aceptará recomendaciones del FBI sobre la indagación contra Clinton
La fiscal general de Estados Unidos, Loretta Lynch, aseguró este viernes que aceptará plenamente las recomendaciones del FBI respeto a las investigaciones sobre los correos de Hillary Clinton, descartando de esa forma sospechas de interferencias políticas en el caso.
Las recomendaciones formuladas por los investigadores del FBI serán "revisadas por supervisores de carrera en el Departamento de Justicia y el director del FBI, y entonces serán presentadas a mí. Y yo espero aceptarlas", dijo Lynch.
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El FBI está ampliando la investigación de que Hillary Clinton usó una cuenta de correo electrónico privado, mientras era secretaria de Estado de EU, con el fin de determinar si se violaron leyes contra la corrupción, de acuerdo con Reuters.
La fiscal general se encuentra bajo una enorme presión luego de conocerse su encuentro con el expresidente Bill Clinton este jueves en Arizona, lo que dio lugar a temores de que influencias políticas comprometan la integridad de la investigación del FBI contra Hillary.
En una tentativa por disipar la nube de sospechas que se formó por su encuentro con el expresidente Clinton, Lynch aseguró que "aceptará las recomendaciones" de los agentes del FBI "y sus planes para seguir adelante".
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Lynch aseguró que el encuentro con el ex presidente y marido de la actual candidata demócrata a la presidencia, no estuvo relacionada con la investigación que la policía federal realiza sobre el uso de un servidor privado de correo cuando Hillary era Secretaria de Estado, en el periodo de 2009 a 2013.
En ese encuentro, dijo Lynch, ella y el expresidente hablaron de sus nietos y de viajes, pero inmediatamente admitió que el encuentro ha despertado cuestionamientos.
"Entiendo la forma en que la gente lo ve", indicóLynch este viernes, para añadir que "ciertamente no lo haría de nuevo porque arroja una sombra" sobre la investigación.
El escándalo sobre el uso del servidor ha nublado por meses la campaña de Clinton, quien enfrenta una una reñida batalla por la Casa Blanca con el magnate inmobiliario Donald Trump, virtual aspirante del partido Republicano.
