El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se reunió este viernes con la reina Isabel de Inglaterra en el Castillo de Windsor.
Si bien el viaje de Trump no fue la visita de Estado que había prometido originalmente, fue escoltado por bandas militares en su arribo a Windsor, antes de un encuentro en el que se esperaba que el mandatario y la primera dama Melania tomaran el té con la reina de 92 años.
Mientras Isabel esperaba para la llegada de Trump, miró su reloj.
El mandatario debe volar a Escocia más tarde este viernes para un viaje privado, antes de dirigirse a Helsinki para asistir a un encuentro con el presidente ruso, Vladimir Putin.