Bares, restaurantes, salas de conciertos o gimnasios serán algunos de los establecimientos que tendrán que exigir prueba de vacunación a sus empleados y clientes, según la orden ejecutiva que prepara el Ayuntamiento y que llega después de que algunos negocios comenzaran en los últimos días a aplicar la medida a título individual.
Para facilitar el proceso, la ciudad anunció la creación de una aplicación móvil con la que los ciudadanos podrán demostrar haber sido vacunados, aunque también se aceptarán otras fórmulas como la app que ya han puesto en marcha las autoridades estatales o la simple tarjeta en papel que se entrega en todo el país en el momento del pinchazo.
En la hostelería, los no vacunados podrán ser atendidos en las terrazas, con las que cuentan la mayoría de establecimientos desde el estallido de la pandemia de COVID-19.
El alcalde aseguró que la medida fue consultada con el Departamento de Justicia de Estados Unidos y que cuenta con un sólido respaldo jurídico, a pesar de que por ahora las vacunas contra el COVID-19 sólo cuentan con autorización de emergencia.
Los gobernadores de Nueva York y Nueva Jersey dijeron el lunes que se requerirá que los trabajadores de transporte, cárceles, hospitales y hogares de ancianos se vacunen o se sometan a pruebas periódicas. El alcalde de Denver, Michael Hancock, dijo que la vacunación será obligatoria para los más de 11,000 empleados de la ciudad.
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, instó el lunes a los bares, restaurantes y otras empresas privadas a exigir que los clientes se vacunen antes de poder ingresar. Cuomo dijo que las vacunas podrían ser obligatorias para los trabajadores de hogares de ancianos, maestros y trabajadores de la salud si el número de casos no disminuye.
En tanto, el gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, sugirió que podría tomar medidas aún más drásticas contra los residentes y las empresas.
Con información de AFP y EFE