"Hay un enorme agujero donde el avión se estrelló. El agua se ha acumulado allí (...) y seguramente serán necesarias obras de drenaje", explicó.
La cadena CCTV emitió imágenes de los restos blancos del avión, esparcidos por la tierra marrón oscuro, así como de carteras, documentos de identidad, ropa o cámaras de fotos.
La posible confirmación de la muerte de los 123 pasajeros y nueve miembros de la tripulación lo convertiría en el peor accidente aéreo desde 1994 en China, donde la seguridad aérea está considerada muy buena por los expertos.
Según la CAAC, todas las personas a bordo eran de nacionalidad china.
Caída en picado
Por el momento se desconocen los motivos del accidente. Según los datos de la web especializada Flightradar, el avión se inclinó bruscamente hacia el suelo antes de estrellarse, un comportamiento inusual, según los expertos.
"Cuando el controlador aéreo se dio cuenta de la brusca caída de altura del avión, se puso inmediatamente en contacto con la tripulación, varias veces, pero no obtuvo respuesta", dijo el martes Zhu Tao, director de seguridad aérea de la CAAC.
Según Mao Yanfeng, director del departamento de investigación de accidentes de la CAAC, durante el vuelo "el clima no presentaba ningún riesgo particular".
Tampoco hay sospechas sobre el comportamiento del capitán y sus dos copilotos, que acumulaban 6.709, 31.769 y 556 horas de vuelo respectivamente, dijo el miércoles Sun Shiying, un directivo de China Eastern.
"En base a los primeros elementos que tenemos, las hojas de servicio de estos pilotos generalmente eran muy buenas y sus situaciones familiares eran armoniosas”, añadió.
El avión estaba en servicio desde 2015.