Ucrania, que fue invadida por Rusia el 24 de febrero, sufre enormes problemas económicos tras la destrucción de infraestructuras, el cierre de negocios y la reducción de la actividad.
La guerra también afecta mucho al importante sector agrícola.
Funcionarios ucranianos han informado al Fondo Monetario Internacional (FMI) que necesitan 5,000 millones de dólares (4,590 millones de euros) mensuales para que la economía del país siga funcionando, dijo el miércoles la directora general de la institución, Kristalina Georgieva.
El FMI espera una contracción del 35% del PIB de Ucrania este año.
Georgieva pidió a los países que brinden apoyo financiero a Ucrania para que el gobierno pueda seguir funcionando.
El subsecretario del Tesoro, Wally Adeyemo, también asistirá a la reunión del jueves, así como el ministro de Finanzas ucraniano, Sergey Marchenko, quien participó el miércoles en la reunión del G20 a pesar de que Ucrania no es miembro.
Varios ministros de Finanzas y los gobernadores de los bancos centrales del G20 abandonaron la sesión plenaria o apagaron sus pantallas para protestar contra la presencia de Rusia.