La etiqueta de "emergencia mundial" solo se aplica actualmente a la pandemia de coronavirus y a los esfuerzos en curso para erradicar la poliomielitis, y la agencia de la ONU ha renunciado a aplicarla al brote de viruela del mono tras el consejo de una reunión de expertos internacionales.
En las últimas seis semanas se han registrado más de 3,200 casos confirmados de viruela del mono y una muerte en 48 países donde no suele propagarse, según la OMS.
En lo que va de año también se han registrado casi 1,500 casos y 70 muertes en África central, donde la enfermedad es más común, principalmente en la República Democrática del Congo.
La viruela del mono, una enfermedad vírica que provoca síntomas parecidos a los de la gripe y lesiones en la piel, se ha extendido sobre todo entre los hombres que mantienen relaciones sexuales con otros hombres fuera de los países donde es endémica.
Hay vacunas y tratamientos disponibles para la viruela del mono, aunque su oferta es limitado.
Es probable que la decisión de la OMS reciba críticas por parte de los expertos en salud mundial, que afirmaron antes de la reunión que el brote cumplía los criterios para ser calificado de emergencia.
Sin embargo, otros señalaron que la OMS se encuentra en una posición difícil después de COVID-19. Su comunicado de enero de 2020 de que el nuevo coronavirus representaba una emergencia de salud pública fue ampliamente ignorada por muchos Gobiernos a unas seis semanas después, cuando la agencia utilizó la palabra "pandemia" y los países tomaron medidas.