En uno de los estudios realizado por investigadores de la Universidad de Hong Kong, en colaboración con la Organización Mundial de la Salud, se analizan los datos de los más recientes brotes en Hong Kong y Shanghái. Y los cálculos no son alentadores: se espera que los hospitales se vean rebasados pronto y que esto dé lugar a cerca de un millón de muertes en los próximos dos meses.
Podría ser peor el impacto si se considera que estas estimaciones incluyen solo los decesos directamente por enfermedad de covid-19; no tiene en cuenta muertes asociadas con los retrasos en los tratamientos de pacientes con otras enfermedades.
La cuarta dosis, ¿una salvación?
Las muertes pueden reducirse 35%, según un estudio consultado por Nature, si el 85% de las personas en China reciben una cuarta dosis de la vacuna contra el covid-19. Siempre y cuando se administren suficientes medicamentos antivirales a personas de la tercera edad y con alguna vulnerabilidad.
Otro modelo estima que podrían prevenirse 290,000 muertes, entre diciembre y abril, si se toman medidas como vacunación, restricciones sanitarias y uso generalizado de cubrebocas.
Las calles de las principales ciudades chinas estaban inquietantemente tranquilas el domingo, porque la gente se quedaba en casa para protegerse de un aumento de los casos de covid-19 que ha afectado a los centros urbanos de norte a sur.
China se encuentra en la primera de las tres oleadas de casos de COVID previstas para este invierno, según el epidemiólogo jefe del país, Wu Zunyou. Habrá nuevas a medida que la población siga la tradición de regresar a sus lugares de origen por las vacaciones del Año Nuevo Lunar, el mes que viene.
China no ha notificado ninguna muerte por covid desde el 7 de diciembre, cuando puso fin abruptamente a la mayoría de las restricciones de una política de tolerancia cero al covid tras unas protestas públicas sin precedentes. La estrategia había sido defendida por el presidente Xi Jinping.
Como parte de la relajación de las restricciones, se ha puesto fin a las pruebas masivas de detección del virus, lo que pone en duda que las cifras oficiales de casos puedan reflejar toda la magnitud del brote. China notificó unos 2.097 nuevos casos sintomáticos de infección por covid el 17 de diciembre.
Afecta las actividades económicas
En Pekín, la propagación de la variante ómicron, altamente transmisible, ya ha afectado a servicios que van desde los restaurantes hasta el reparto de paquetes.
Las funerarias y crematorios de esta ciudad de 22 millones de habitantes también están tratando de sostener el ritmo de la demanda debido a la escasez de personal y a las bajas por enfermedad de trabajadores y conductores.