Para hacer el estudio, cuyas conclusiones se publicaron el miércoles en la revista Nature, los científicos han reconstruido las temperaturas en el centro-norte de Groenlandia y las tasas de fusión del hielo entre el 1,100 y el 2,100.
Debido a su tamaño y la gran cantidad de agua que almacena —unos tres millones de kilómetros cúbicos—, la capa de hielo de Groenlandia desempeña un papel fundamental en el sistema climático mundial.
El derretimiento del hielo de Groenlandia ya es la principal causa del alza de los niveles del mar, lo que amenaza la vida de millones de personas que viven áreas costeras que podrían quedar bajo el agua en las próximas décadas o en los siglos venideros.
El casquete de hielo de Groenlandia es actualmente el principal factor de crecimiento de los océanos, según la NASA, y la región del Ártico se está calentando a un ritmo más rápido que el resto del planeta.
Si no se reducen las emisiones globales, se espera que el deshielo de Groenlandia eleve 50 centímetros el nivel global del mar en 2100.
Este denso casquete, que tiene un grosor de 2 kilómetros, tiene suficiente agua congelada para elevar siete metros el nivel de los océanos en todo el mundo.
El estudio liderado por expertos del Instituto Alfred Wegener y del Centro Helmholtz de Investigación Polar y Marina (AWI) presenta pruebas contundentes de que los efectos del calentamiento global han llegado a las zonas remotas y elevadas del centro-norte de Groenlandia.