Áreas de muy difícil acceso
Dado que gran parte de la zona afectada por el sismo se encuentra en áreas de difícil acceso, aún no se ha podido determinar el impacto total. Las autoridades no han facilitado estimaciones sobre el número de personas que siguen desaparecidas.
En una carretera cercana a la ciudad de Adassil, no lejos del epicentro, el socorrista Ayman Koait intentaba despejar los desprendimientos de rocas que bloqueaban el tráfico.
"Hay carreteras peores más arriba que siguen bloqueadas y estamos intentando abrirlas también", dijo mientras furgonetas cargadas de ayuda se apretujaban por una estrecha pista despejada.
Muchas estructuras se desmoronaron con facilidad, incluidas las omnipresentes casas tradicionales de adobe, piedra y madera tosca, uno de los rasgos pintorescos que han hecho del Alto Atlas un imán para los turistas durante generaciones.
"Es difícil sacar a la gente con vida porque la mayoría de las paredes y techos se convirtieron en escombros de tierra cuando cayeron, sepultando a quien estuviera dentro sin dejar espacio al aire", dijo un trabajador militar, que pidió no ser nombrado debido a las normas del Ejército.
Según el Servicio Geológico de Estados Unidos, se trata del terremoto más mortífero en el país norteafricano desde 1960, cuando un sismo ocurrido en Agadir el 29 de febrero de 1960 mató a casi 15,000 personas, un tercio de la población de esta ciudad en la costa oeste.
Pérdidas patrimoniales
La Cruz Roja Internacional advirtió de la importancia de la ayuda humanitaria que, según ellos, puede ser necesaria "durante meses o incluso años". Pero las primeras "24 o 48 horas (son) críticas", advirtió.
Además de las pérdidas humanas y materiales, el sismo afectó al patrimonio arquitectónico del reino. En la medina del barrio antiguo de Marrakech, los daños son impresionantes.
Las murallas del siglo XII que rodean la ciudad imperial, fundada sobre el año 1070 por la dinastía de los almorávides, están parcialmente desfiguradas.
"Ya podemos decir que (los daños) son mucho más importantes de lo que esperábamos.
Hemos visto fisuras importantes en el minarete de (la mezquita de) Kutubia, la estructura más emblemática, pero también ha quedado destruido casi completamente el minarete de la mezquita de Kharbouch" en la plaza Yamaa el Fna, sostuvo Eric Falt, director regional de la Unesco para el Magreb.
Con información de AFP y Reuters