En la ciudad ocre, donde se registró un balance provisional de 13 muertos, cientos de turistas y residentes de los barrios vecinos se refugiaron en la famosa plaza Yamaa el Fna. Muchos durmieron en el suelo, a veces sin cobijas.
'Morir sola'
Otros no consiguieron pegar ojo, como Ghannou Najem, octogenaria que llegó desde Casablanca a Marrakech unas horas antes del temblor.
"Vine para visitar la ciudad con mi hija y mi nieta. Por la noche ellas salieron y yo me quedé en el hotel. Iba a dormir cuando escuché portazos y el ruido de las contraventanas. Salí aterrada, creí que iba a morir sola", afirmó.
unos metros, Rabab Raïss, envuelta en un edredón, describió el sismo como "la experiencia más traumática de mi vida".
"Veía a la gente correr por todas partes, había mucho polvo por los derrumbes. Estaba aterrorizada", afirmó la joven de 26 años, residente en Marrakech.
"Es una experiencia dolorosa, estoy de todo corazón con las familias de las víctimas", añadió.
Además de Marrakech, el violento temblor se sintió en Rabat, Casablanca, Agadir y Esauira, sembrando el pánico entre la población.
Muchas personas salieron a las calles de esas ciudades, temiendo el derrumbe de sus viviendas, según imágenes publicadas en redes sociales.
En 2004, al menos 628 personas murieron y 926 resultaron heridas cuando un terremoto de magnitud 6,3 golpeó Alhucemas, al noreste del país.
Una experiencia traumática
A unos metros, Rabab Raïss, envuelta en un edredón, describió el sismo como "la experiencia más traumática de mi vida".
"Veía a la gente correr por todas partes, había mucho polvo por los derrumbes. Estaba aterrorizada", afirmó la joven de 26 años, residente en Marrakech.
"Es una experiencia dolorosa, estoy de todo corazón con las familias de las víctimas", añadió.
Además de Marrakech, el violento temblor se sintió en Rabat, Casablanca, Agadir y Esauira, sembrando el pánico entre la población.
Muchas personas salieron a las calles de esas ciudades, temiendo el derrumbe de sus viviendas, según imágenes publicadas en redes sociales.