Una unidad de fuerza móvil, formada por 100 agentes, situados por delante y por detrás del convoy, estará encargada también de luchar "contra cualquier forma de desorden público", precisó el ministro.
En esta "burbuja", "18 policías y gendarmes como civiles" garantizarán la seguridad del relevista con "protección cercana”.
El ministro afirmó que la "amenaza terrorista y de protesta" contra el relevo es significativa, y citó a "activistas ecologistas de extrema izquierda" o "islamistas radicales" como posibles fuentes de tales amenazas.
"El relevo de la antorcha es objeto de una gran atención mediática y el ministerio le presta una atención especial, ya que podría ser objetivo de actos malintencionados", afirmó. "Hemos comprobado los antecedentes de los 11,000 portadores de la antorcha y de los mil sustitutos, y eso ha hecho que 13 quedaran fuera del relevo”.
La llama olímpica llegará a Marsella procedente de Grecia el 8 de mayo, y se espera que hasta 150,000 personas asistan a la ceremonia en el Puerto Viejo de la ciudad meridional antes de que comience la etapa francesa del relevo.
En la llegada de la antorcha a Marsella, donde se esperan alrededor de 150,000 personas, se movilizarán 5,000 policías y gendarmes.
La seguridad del recorrido de la antorcha costará un millón de euros (1,09 millones de dólares) al ministerio del Interior, desveló Darmanin.