La operación militar de Israel contra la Franja de Gaza ha puesto de manifiesto la polarización que existe en América Latina. Mientras algunos gobiernos han manifestado su rechazo enérgico ante las acciones contra el enclave palestino, otros han brindado su apoyo total al Estado hebreo.
A casi seis meses del inicio de la acción militar israelí contra Hamás, el grupo que controla la Franja de Gaza desde 2007, estas han sido las distintas posiciones que han adoptados los países de América Latina.
La llegada al gobierno de Argentina del ultraliberal Javier Milei, en diciembre de 2023, ha sido un enorme cambio no solo para la política de este país, la tercera economía más importante de la región, sino para la relación de América Latina con Israel.
El presidente argentino, que ha alineado su política exterior a la de Estados Unidos, visitó Israel en febrero, durante su segundo viaje al extranjero desde que asumió la presidencia. En el kibutz Nir Oz, atacado por Hamás el 7 de octubre, anunció que mudaría la embajada argentina de Tel Aviv a Jerusalén.
"El mundo libre no puede permanecer indiferente. Es un acto claramente terrorista, antisemita, y diría que es nazismo del siglo XXI", declaró el presidente argentino sobre los ataques de Hamás, que dejaron por lo menos 1,200 muertos. Además, fueron secuestradas 250 personas. Tanto entre las víctimas mortales, como entre los rehenes, hay ciudadanos argentinos.
En represalia, Israel lanzó una operación militar para aniquilar al grupo islamista, que ha dejado como saldo la muerte de más de 34,000 personas hasta el momento, de acuerdo con datos del Ministerio de Salud de la Franja de Gaza, controlado por Hamás.
En una entrevista que brindó al medio Neura el 8 de abril, Milei sostuvo que "lo importante es aliarse con Israel", y en otra con la CNN a fin de marzo, Milei aseguró que "Israel no está cometiendo ni un solo exceso” en la Franja de Gaza.
Tras el ataque de Irán contra Israel, el 13 de abril, Milei expresó su solidaridad “inclaudicable" con Israel y adelantó su regreso a Argentina de un viaje para para conformar un Comité de Crisis por la ofensiva de la república islámica.
Lula, de 78 años, afirmó en noviembre que el movimiento islamista palestino Hamás había cometido "un acto de terrorismo" en su ataque del 7 de octubre contra Israel. Pero al mismo tiempo Lula ha criticado la "respuesta desproporcionada" de Israel en Gaza.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, acusó el 18 de febrero a Israel de cometer un "genocidio" contra civiles palestinos en la Franja de Gaza y comparó sus acciones con la campaña de Adolf Hitler para exterminar a los judíos.
"Lo que está ocurriendo en la Franja de Gaza no es una guerra, es un genocidio", declaró ante la prensa en Adís Abeba, en Etiopía, donde participó como invitado en la cumbre anual de la Unión Africana.
El mandatario de izquierda de la principal potencia latinoamericana declaró que el conflicto "no es una guerra de soldados contra soldados".
"Es una guerra entre un ejército muy preparado y mujeres y niños", afirmó.
"Lo que está ocurriendo en la Franja de Gaza con el pueblo palestino no ha ocurrido en ningún otro momento de la historia. En realidad, ha ocurrido: cuando Hitler decidió matar a los judíos", agregó.
En respuesta, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, calificó los comentarios de Lula de "vergonzosos y graves" y anunció que su gobierno convocó al embajador de Brasil en Israel.
"La comparación entre Israel y el Holocausto de los nazis y Hitler supone cruzar una línea roja", señaló el mandatario en un comunicado.
"Al comparar con el Holocausto la guerra de Israel en Gaza contra el Hamás, una organización terrorista genocida, el presidente da Silva deshonra la memoria de los 6 millones de judíos asesinados por los nazis y diaboliza el Estado judío como el más virulento de los antisemitas. Debería darle vergüenza", abundó Netanyahu por la noche, en un discurso en Jerusalén.
Al día siguiente, el ministro de Relaciones Exteriores, Israel Katz, declaro a Lula "persona non grata" por comparar la actual guerra contra Hamás en Gaza con el Holocausto.
"No toleraremos que dirigentes de todo el mundo intenten darle a Hamás cobertura política o jurídica", señaló ante la prensa el portavoz del gobierno israelí, Eylon Levy.
Chile, con medio millón de personas, es el país con la mayor comunidad palestina fuera de los países árabes.
El gobierno del izquierdista Gabriel Boric ha sido crítico de la ofensiva militar lanzada por Israel en la franja de Gaza tras el ataque del 7 de octubre del grupo islamista Hamás en territorio israelí.
A fines de octubre, Chile llamó a consultas a su embajador en Israel en protesta por la operación militar y aún el diplomático no ha regresado a sus funciones.
Boric ha abogado reiteradamente por un pronto cese al fuego en la zona de conflicto.
Además, Chile en conjunto con México presentó en enero ante el fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI) una solicitud para que se investiguen probables crímenes de guerra en el marco del conflicto entre Israel y Hamás.
El gobierno de Chile anunció el 5 de marzo que decidió excluir a firmas israelíes de la principal feria aeroespacial y de defensa de América Latina, que se realizó en Santiago en abril.
"Por decisión del Gobierno de Chile, la versión 2024 de la Feria Internacional del Aire y del Espacio (Fidae), que se realizará entre el 9 y 14 de abril, no contará con la participación de empresas israelíes", dice un comunicado del Ministerio de Defensa.
"En una feria como la Fidae excluir o no invitar a empresas que de una u otra manera están siendo parte de aquello que criticamos nos parece que es coherente", explicó Boric unos días después, en una conferencia de prensa conjunta con el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez. "No me parecería prudente ni coherente que empresas israelíes vengan a exponer armamento a Chile en estas condiciones", agregó el mandatario chileno.
De acuerdo con el mandatario chileno, "lo que está sucediendo en Gaza no tiene justificación alguna".
El embajador de Israel en Chile, Gil Artzyeli, dijo a la AFP que el gobierno no se había contactado con él para darle la noticia y que sólo se informó por el comunicado del ministerio.
"Difícil decir que estamos sorprendidos tomando en cuenta la doctrina del gobierno hacia Israel", afirmó Artzyeli.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha sido un duro crítico de las acciones de Israel en la Franja de Gaza.
Colombia apoya la demanda presentada por Sudáfrica contra Israel en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) por la supuesta violación de la Convención de 1948 contra el Genocidio y en abril solicitó intervenir en la demanda.
"Colombia presentó en la Secretaría de la Corte una declaración de intervención en el caso" impulsado desde diciembre por Pretoria, que acusa a Israel de cometer un "genocidio" en Gaza, indicó la Corte un comunicado.
En un mensaje enviado a medios, la cancillería colombiana hizo un "llamado a que otros Estados Parte en la Convención de 1948 se sumen a este procedimiento".
En el marco de la demanda de Sudáfrica, el tribunal de la ONU con sede en La Haya exigió a Israel el 26 de enero impedir cualquier acto de genocidio y facilitar la entrada de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza.
Sin embargo, la CIJ no ha determinado por el momento si las operaciones israelíes en Gaza se encuadran en la figura legal de un genocidio.
Petro apoyó a Lula en su disputa diplomática con Israel.
”En Gaza hay un genocidio y se asesina cobardemente a miles de niños, mujeres y ancianos civiles. Lula solo ha dicho la verdad y la verdad se defiende o la barbarie nos aniquilará", escribió Petro en la red social X (antes Twitter). ”Expreso mi solidaridad integral al presidente del Brasil", agregó el primer mandatario de izquierda en la historia de Colombia.
Todo esto no impidió a Petro aceptar ser mediador para negociar la liberación de los rehenes israelíes a través de una comisión de paz como respuesta a una solicitud del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
"Con el objetivo claro de conducirnos hacia consensos (...) considero prioritario que se avance rápidamente hacia un cese de hostilidades e iniciar conversaciones para la liberación de todos los rehenes", dijo en una carta el mandatario colombiano, quien apoya abiertamente la causa palestina y acusa a Israel de cometer un "genocidio" en la Franja de Gaza.
"Propongo que avancemos en crear una Comisión de Paz integrada por diversos países para garantizar estas liberaciones y lograr el objetivo mayor de terminar con la violencia desatada entre Israel y Palestina", añadió Petro en respuesta a una carta privada de Netanyahu del 11 de enero.
En esa misiva el líder israelí le pedía hacer "todos los esfuerzos" para interceder por más de un centenar de personas en manos del grupo islamista palestino Hamás.
El primer presidente de izquierda en la historia de Colombia empezó su respuesta evocando el proceso de paz del que fue protagonista cuando él y otros guerrilleros del M-19 depusieron las armas en 1990.
"Fue un ejemplo exitoso de reconciliación y de construcción civilizada", indicó Petro y añadió que "ese mismo esfuerzo y compromiso" lo llevó a Naciones Unidas cuando propuso una conferencia de paz sobre Palestina y otra sobre la invasión rusa a Ucrania.
México ha intentado, desde por lo menos el año 29, una política de equidistancia respecto al conflicto entre Palestina e Israel. Tras los ataques de Hamás, la cancillería mexicana condenó los hechos, a los que calificó de un acto terrorista e indicó que reconocía el derecho de Israel a la debida defensa.
“México favorece una solución integral y definitiva al conflicto, bajo la premisa de dos Estados, que atienda las legítimas preocupaciones de seguridad de Israel y permita la consolidación de un Estado palestino política y económicamente viable que conviva con Israel dentro de fronteras seguras e internacionalmente reconocidas de conformidad con las resoluciones pertinentes de Naciones Unidas”, indicó la Secretaria de Relaciones Exteriores en un comunicado.
El presidente, Andrés Manuel López Obrador, ha abogado por un alto al fuego.
