Trump ha tratado de retratar a Harris como de extrema izquierda en una serie de políticas. En el mitin destacó su anterior llamamiento a prohibir el fracking, una industria importante para el estado. La campaña de Harris ha indicado recientemente que ella no apoyaría una prohibición.
También siguió atacando a Harris en términos personales, a pesar de que algunos analistas políticos dicen que esos comentarios podrían perjudicar a Trump entre los votantes moderados.
“¿Has oído su risa? Esa es la risa de una persona loca", dijo Trump.
Pensilvania fue uno de los tres estados del cinturón industrial, junto con Wisconsin y Michigan, que ayudaron a impulsar la sorprendente victoria de Trump en 2016. Biden, que creció en Scranton, Pensilvania, consiguió que los demócratas volvieran a ganar en los tres estados en 2020.
Con 19 votos electorales de los 270 necesarios para asegurarse la Casa Blanca, frente a los 15 de Michigan y los 10 de Wisconsin, Pensilvania puede ser el mayor premio de las elecciones de este año y potencialmente inclinar la balanza para ambos candidatos.
La entrada de Harris en la carrera después de que Biden puso fin a su intento de reelección el mes pasado ha dado un vuelco a la contienda, borrando la ventaja que Trump construyó durante las últimas semanas de la tambaleante campaña de Biden. Harris aventaja a Trump en más de dos puntos porcentuales en Pensilvania, según el sitio web de seguimiento de encuestas FiveThirtyEight.
Avalancha de anuncios
Trump ganó Pensilvania en 2016 por unos 44.000 votos, un margen de menos de un punto porcentual, mientras que Biden se impuso por poco más de 80.000 votos en 2020, un margen del 1,2%.
Ambas campañas han hecho del estado una prioridad absoluta, lanzando una avalancha de anuncios.
De los más de 110 millones de dólares gastados en publicidad en siete estados disputados desde que Biden abandonó la carrera a finales de julio, aproximadamente 42 millones se gastaron en Pensilvania, más del doble que en cualquier otro estado, informó el Wall Street Journal el viernes, citando datos del sitio de seguimiento AdImpact.
Los grupos demócratas y republicanos ya han reservado 114 millones de dólares en publicidad en Pensilvania desde finales de agosto hasta las elecciones, más del doble que los 55 millones reservados en Arizona, el siguiente estado con mayor inversión, según AdImpact.
La campaña de Harris dijo el sábado que planeaba gastar al menos 370 millones de dólares en anuncios digitales y televisivos en todo el país entre la festividad del Día del Trabajo, el 2 de septiembre, y el día de las elecciones.
Entre los estados más disputados -considerados cruciales para ganar las elecciones- figuran también Arizona, Carolina del Norte, Nevada y Georgia.
Según nuevas encuestas publicadas el sábado por el New York Times, Harris aventaja a Trump entre los votantes probables en Arizona, 50% a 45%, y en Carolina del Norte, 49% a 47%, y reduce la ventaja del expresidente en Nevada, 47% a 49%, y en Georgia, 46% a 50%. Un encuestador de la campaña de Trump dijo que los resultados del sondeo subestimaban el apoyo del candidato republicano.
Trump y Harris han visitado Pensilvania más de media docena de veces cada uno este año. Trump resultó herido durante un intento de asesinato en su mitin cerca de Butler, Pensilvania, el 13 de julio.
Trump hará declaraciones sobre la economía en un acto de campaña en York, Pensilvania, el lunes. Su compañero de fórmula, el senador estadounidense JD Vance, también celebrará un acto en Filadelfia ese día.
El viaje de Trump el sábado a Wilkes-Barre, en el condado de Luzerne, tiene como objetivo consolidar el apoyo entre los votantes blancos y sin estudios universitarios que le llevaron a la victoria en 2016. El condado obrero votó demócrata durante décadas antes de inclinarse fuertemente hacia Trump en 2016, reflejando otras regiones similares en todo el país.
Trump ganó Luzerne en 2020 por 14,4 puntos porcentuales, un margen menor que su victoria de 19,4 puntos en 2016. Con Biden fuera del juego, es probable que Trump vea espacio para ganar en esta zona del estado, dijo Chris Borick, profesor de ciencias políticas en Muhlenberg College.
"Este es el tipo de lugar donde Trump tiene muchos puntos fuertes", dijo Borick, refiriéndose a la región noreste del estado. "Ganancias marginales en una región como esta ciertamente podrían tener algún impacto en su capacidad para recuperar Pensilvania".
Harris y su compañero de fórmula, el gobernador de Minnesota Tim Walz, harán varias paradas en los condados de Allegheny y Beaver el domingo, dijo la campaña. La gira es la primera vez que Harris, Walz y sus cónyuges hacen campaña juntos desde su primer mitin como candidatura presidencial en Filadelfia a principios de este mes.
Pensilvania estaba en el centro de la estrategia victoriosa de Biden en 2020 en los estados del cinturón del industrial: limitar los márgenes de Trump entre los votantes blancos de clase trabajadora mientras se construían mayorías entre los votantes suburbanos y se impulsaba una mayor participación en las zonas urbanas con grandes poblaciones negras.
La campaña de Harris persigue una estrategia similar de "ganar mucho, perder poco", con el objetivo de obtener grandes márgenes en las ciudades y suburbios de Filadelfia y Pittsburgh, al tiempo que limita las pérdidas en condados más pequeños como el condado de Beaver, donde Trump obtuvo el 58% de los votos en 2020.
