Presentado por su hija, Ashley, Biden apareció de traje y corbata azul. Se le vio por segundos secando algunas lágrimas, al igual que Harris, quien más temprano apareció en escena brevemente para dar inicio a la cita agradeciendo al mandatario, a quien calificó de "increíble".
La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, abrió la Convención Nacional Demócrata en Chicago homenajeando al presidente Joe Biden, quien le pasará esta noche el testigo electoral para enfrentar la reñida pelea por la Casa Blanca.
Harris, de 59 años, dijo estar "eternamente agradecida" con Biden, a quien llamó un "increíble presidente".
"Joe, gracias por tu liderazgo histórico, por tu vida de servicio a nuestra nación", dijo aclamada por los miles de delegados que se dieron cita en el United Center, casa de los Chicago Bulls y los Chicago Blackhawks.
En su discurso, justo como lo hizo en la campaña, Biden dijo que las elecciones son una lucha existencial por la democracia, un problema al que la campaña de Harris se ha aproximado de manera distinta.
“La democracia ha prevalecido, la democracia ha sido llevada y ahora la democracia debe ser preservada”, dijo al inicio de su mensaje.
Biden destacó el crecimiento económico, la creación de empleos y la reducción en la inflación, a pesar de que una de las críticas de los republicanos a su gobierno ha sido el aumento de los costos de vida.
“Gracias a Kamala también”, dijo Biden mientras el público vitoreaba “Gracias, Joe”.
“Hemos construido un mejor Estados Unidos”, aseguró Biden. Afirmó que el país lidera en ciencia y tecnología gracia a la Ley CHIPS, que busca traer la fabricación de semiconductores a Estados Unidos, para evitar la dependencia con China, el principal rival a la hegemonía estadounidense.