Estas predicciones causan preocupación en Florida, así como en todo el sureste del país, gran parte del cual ha quedado devastado desde el paso de Helene.
Los servicios de emergencia siguen trabajando arduamente para ayudar a las numerosas víctimas de este huracán, el más mortífero que ha azotado Estados Unidos desde Katrina, en 2005.
Helene, que alcanzó su punto máximo como huracán de categoría 4, causó hasta ahora 226 muertes en media docena de estados del sureste del país y provocó inundaciones de gran porte.
Al calentar las aguas del mar, el cambio climático hace más probable una rápida intensificación de las tormentas y aumenta el riesgo de huracanes más poderosos, según numerosos científicos.
El Observatorio Meteorológico de Estados Unidos (NOAA) advirtió a finales de mayo que la temporada de huracanes, que se extiende desde principios de junio hasta finales de noviembre, se perfilaba esta vez como extraordinaria, con la posibilidad de entre cuatro y siete huracanes de categoría 3 o más.
Afectaciones en México
México emitió una alerta para la zona norte de la península de Yucatán, desde las turísticas playas de Celestún hasta cabo Catoche, mientras que una advertencia de tormenta tropical se extendía hasta Cancún.
En su paso por la península mexicana Milton dejará fuertes precipitaciones que "podrían generar deslaves, incremento en niveles de ríos y arroyos, así como desbordamientos e inundaciones en zonas bajas", señaló la estatal Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Se prevé que Milton se desplace al norte de la península de Yucatán, atraviese el golfo de México y sea un huracán de gran intensidad cuando alcance la costa oeste de la península de Florida el miércoles, añadió la institución.