El próximo primer ministro tendrá por misión "formar un gobierno de interés general que represente a todas las fuerzas políticas de un arco de gobierno que pueda participar en él o, al menos, que se comprometa a no censurarlo", indicó.
Los aliados del propio Macron se unieron al coro que pedía una acción rápida. Tras las elecciones anticipadas de finales de junio y principios de julio, Macron tardó casi dos meses en nombrar a Barnier.
"Le recomiendo que proceda rápidamente al nombramiento de un primer ministro, es importante, no debemos dejar las cosas en el aire", dijo la presidenta de la Asamblea Nacional, Yael Braun-Pivet, a la radio France Inter antes de reunirse con Macron alrededor del mediodía.
¿Un gobierno provisional?
El gobierno de Barnier puede permanecer en funciones para ocuparse de los asuntos cotidianos mientras Macron intenta trazar un camino para salir del embrollo.
Si el Parlamento no ha aprobado un presupuesto para el 20 de diciembre, el gobierno puede proponer una legislación de emergencia que prorrogaría los límites de gasto y las disposiciones fiscales de 2024, a la espera de la instalación de un nuevo gobierno y un nuevo proyecto de presupuesto para 2025.
Los 60,000 millones de euros (63.000 millones de dólares) de ahorro a través de recortes de gastos y subidas de impuestos previstos por el gobierno de Barnier —y bien acogidos por los inversores y las agencias de calificación— se quedarían por el camino.
El partido de Le Pen ha dicho que los hogares estarían mejor en este escenario, algo que el gobierno de Barnier niega. Afirma que más personas acabarán pagando impuestos o impuestos adicionales si los umbrales no pueden ajustarse a la inflación.
Si el Parlamento no ha aprobado el presupuesto de 2025 antes del 20 de diciembre, el Gobierno puede invocar sus poderes constitucionales para aprobarlo por decreto.
Sin embargo, esto sería muy arriesgado, según los juristas, ya que no está claro si un gobierno provisional puede hacer uso de tales poderes. Hacerlo desencadenaría inevitablemente una agitación política.